Viendo lo visto no tengo más remedio que reconocer que
nuestros jugadores, en distintas disciplinas, tienen un gen competitivo del que
carecen otros muchos equipos.
El equipo de baloncesto por el que nadie daba un duro se ha
metido en semifinales después de firmar una segunda parte excepcional . Un
equipo pleno de debutantes que ha sabido sobreponerse a un excelente inicio de
Finlandia que, sobre todo, a base de triples, llegó a estar con una ventaja de
quince puntos.
En la reanudación los hombres de Scariolo, con una excelente
y agresiva defensa y el acierro en los triples y en el juego interior sobre
todo con Willy Hernángomez, inmenso , fueron poco a poco limando las diferencias
hasta llegar a los últimos minutos con clara ventaja que se concretó en un
100-90. Una victoria que permite al
remozado equipo español, donde solo queda el capitán, Rudy Fernández que a sus 37
años ha marcado puntos en los momentos decisivos y los hermanos Hernángómez,
meterse en la lucha por las medallas reafirmando el alto nivel que tiene este
deporte en España como hemos podido comprobar este verano con las numerosas
medallas conseguidas por las selecciones inferiores.
Una victoria que se produce tan solo una semana después de que la selección masculina de waterpolo consiguiese el bronce en los europeos, solo horas después de que las chicas ganasen el oro en la misma disciplina. Esa competitividad de nuestros equipos y en el caso concreto del waterpolo tiene su origen en la olimpiada de Barcelona en 1992, una gesta que podemos rememorar en una película comentada en este mismo blog, “42 segundos”.
Y que decir tiene, saliéndonos del deporte en equipo, el triunfo
de Carlos Alcaraz en el US Open que, a sus 19 años se ha convertido en numero
uno mundial. Alcaraz que ya está en España se ha trasladado a Valencia para unirse
al equipo de Copa Davis que es uno de los favoritos para levantar la
ensaladera.
No solo de fútbol vive el nombre, aunque ya estamos en plena
segunda jornada de la Champions.
No hay comentarios:
Publicar un comentario