2/28/2022

PÁGINAS SUELTAS (17) RECORDANDO LA UNIVERSIDAD.

 

(Foto Archivo de la transición)



Sexo, suficiente. Drogas; con espuma. Rock and roll, con poesía…

Sexo. drogas y rock and roll en una universidad que ansiaba que algo ocurriese, que terminase aquella larga e interminable noche que planeaba sobre nosotros .  Eran los setenta y Franco seguía. Habíamos nacido con él y no se iba. La larga mano del régimen llegaba a cualquier rincón y soñábamos con la libertad

Librerías en que adquirías los otros libros; revistas eróticas en el Rastro; canciones prohibidas ; recitales suspendidos , reuniones reivindicativas,  prensa coartada, tijeras, más tijeras, censura.


Biarritz, otra ciudad objeto de peregrinación (Rosebund)


En los setenta los españoles viajaban a Perpiñán en busca de Emmanuel o El último tango . Éramos un país reprimido y triste, en blanco y negro frente a la luminosidad que nos venía de fuera. Democracia seguía siendo una palabra lejana, una utopía insertada en un mundo feliz.

Foto dcineorg


Casi sin darme cuenta, en estas Páginas Sueltas que continúo abriendo, me introduje en la Radio y en algunos de los momentos que viví,   porque fueron más de treinta años los que pasé vinculado a RNE. No busco un orden. Los recuerdos van surgiendo y trato de atraparlos. He recordado a compañeros que están y a los que nos dejaron, pero antes de pasar toda una vida entre máquinas de escribir, teletipos, ordenadores, micrófonos o estudios, pasé cinco años en la Facultad de Ciencias de la Información que, como ya apunté anteriormente, estaba situada en la Dehesa de la Villa, donde está actualmente la Escuela Oficial de Radio Televisión. Aquella sería la primera promoción de la historia, la primera vez que los periodistas saldrían con un titulo universitario bajo el brazo.

Provenía de Derecho donde había matado el tiempo ante el empeño de mi padre de que estudiara esa carrera y esperando a que se abriera definitivamente la facultad de periodismo. Mi abuelo paterno si había estudiado Derecho, pero ninguno de sus hijos, ni ninguno de sus nietos hicieron esa carrera. Y fueron diez los primeros, aunque dos fallecieron durante su infancia y veintiocho los nietos, aunque uno de mis primos, Chema murió siendo un niño de pocos años.

Yo estaba dispuesto a no ser la excepción porque desde siempre me había sentido atraído por el periodismo y, sobre todo, porque me brindaba la oportunidad de escribir. Con poco esfuerzo y pocas ganas aprobé tres de las cuatro asignaturas de primero de Derecho y esas notas me sirvieron de aval para comenzar periodismo y seguir durante un tiempo compaginándolo con Derecho que abandoné a la primera oportunidad. Cuando mis padres y hermanos emigraron a Cádiz dejé la carrera de las leyes porque me aburría soberanamente.
Primera sede en el IORTVE(Todo colección)

Era 1971 y hubo que hacer una prueba de acceso que consistía en una redacción sobre el porqué de nuestro interés por el periodismo. No sé qué contesté, pero aprobé y al poco se iniciaron las clases, el primer curso de periodismo que comenzó tambaleante en aquella sede provisional de la Dehesa de la Villa que, ante la falta de docentes, recurrió al circuito cerrado. Es decir, en un aula estaba el profesor y en otras dos se seguía la clase por un aparato de televisión. Vamos de lo más recomendable para los chavales y chavalas que habíamos elegido una carrera nueva, pensando en un futuro ejercer una profesión libre. Se tele-estudiaba.

Había asignaturas como Redacción ,en la que se redactaba poco; geopolítica de España y Universal; literatura, comunicación , empresa periodística o incluso idiomas. De las once asignaturas, me quedaron cuatro que aprobé en septiembre. En segundo me quedaron tres y de ellas una para febrero , “Técnicas de composición e impresión”, que aprobé gracias a las clases que me dieron durante mis prácticas de verano en el Diario de Cádiz, los obreros del taller. Ellos fueron realmente quienes me enseñaron a utilizar el tipómetro y saber el número de cíceros necesarios. En las madrugadas en el viejo diario de la calle Ceballos olía a pan caliente del horno contiguo que nos servía, a través de las rejas de las ventanas, panes recién hechos que rellenábamos de chacinas , quesos o chicharrones cuando el gallo todavía no había cantado.

Pero, no me desvío. La Facultad de Ciencias de la Información nació alejada del campus, pero participó activamente en la lucha universitaria y en las denuncias contra la dictadura franquista. A finales del 72 tras una serie de incidentes ,el más grave la quema del despacho del vicedecano, varios de nosotros fuimos denunciados y sometidos a Consejos de Disciplina en el Rectorado. Yo acabé siendo expedientado, pero no expulsado como les ocurrió a otros compañeros. Fuimos una veintena próximos a los partidos de izquierda, PCE, LCR u ORT los que tuvimos que someternos a un juicio, sin defensor y en el que, una especie de fiscal nos denominaba los interrogados. Frente a nosotros había un simulacro de tribunal con cuatro o cinco miembros. Apenas dejaban que te explicaras ,como si tuviesen decidido de antemano cuál iba a ser la decisión. En el interrogatorio mezclaron mi supuesta participación en los hechos, con las clases que impartía en barriadas obreras como Orcasitas, a niños sin escolarizar. La policía franquista tenía ramificaciones en todos lados. Aunque no pertenecieras a un partido valía tan solo tu participación en las manifestaciones, las asambleas, el reparto de panfletos o las reuniones clandestinas que se hicieran contra el régimen, para entrar en una lista negra. Hubo un compañero que llegó a ser condenado a seis años de cárcel por el Tribunal de Orden Público, por unas pintadas contra Franco y el régimen que representaba. Durante la vista y ante los murmullos que se producían entre los compañeros que asistimos el juez acabó expulsándonos de la sala.

El siniestro  T.O.P. (Público) 


Estábamos permanentemente vigilados. Aunque no militases en ningún partido  bastaba con reivindicar el movimiento estudiantil contra la dictadura para ser considerado enemigo del régimen.

Yo no había participado en la quema del despacho, ni la mayoría de los compañeros que fuimos juzgados. El ataque al despacho del vicedecano de Ciencias de la Información, creo que se apellidaba Toloni, fue cosa de cinco o seis y de uno de ellos siempre sospeché que era miembro de la brigada político social ,como lo confirmó el hecho de que ni siquiera fuese sometido al Consejo y que tras la expulsión de varios compañeros desapareciese de la Facultad. Los “sociales” solían infiltrarse entre las células comunistas o en las manifestaciones y protestas y eran los “chivatos” que permitían las detenciones y las torturas en la DGS.

No me expulsaron de la universidad, pero me denegaron el certificado de buena conducta que me impedía obtener el pasaporte y salir de España o sea que no saldría más allá de Portugal hasta los años ochenta. Era un certificado paralelo al de penales ,  expedido por la policía  llamado de “buena conducta” que en caso de no obtenerlo podía suponer, no solo que te fuese retirado el pasaporte, sino que tuvieses que hacer la mili suspendiéndose la prórroga que te concedían por estudios.


Unos meses antes de verme obligado a incorporarme al ejército encontré la ayuda necesaria para que se anulasen aquellos antecedentes y retrasar mi ingreso en la mili hasta enero de 1977, tras terminar la carrera en junio de 1976.

 Antes del Consejo de Disciplina ,en verano hicimos un viaje en autostop por el sur de Francia, pero eso da ya para otra historia.

2/27/2022

(AUDIO) En 3' todos los estrenos




Buen cine el que ha llegado a las pantallas este último fin de semana.


Estrenos 25.2.22 



   




2/24/2022

EN UN MINUTO: OTROS ESTRENOS 25-2-2022

 



UN PEQUEÑO MUNDO (72’) Laura Wandel.

El acoso escolar como centro de este filme de producción belga que describe como una niña que comienza a asistir al colegio de su hermano mayor descubre que este es objeto de “bullying”. Cuando se lo cuenta a su padre la situación empeora.

La directora del filme, Laura Wandel quiere poner luz, a través de los ojos de una niña, a la poca atención que prestan los adultos a situaciones que pueden desembocar en la exclusión.

Protagonizan Maya Vanderbeque, Günter Durfet y Karim Leklou, entre otros. La película ganó el premio de la crítica en Cannes y representará a Bélgica en los Oscar.

 


SUPER ¿QUIÉN? (82’) El francés Philippe Lacheau escribe, dirige y protagoniza esta comedia en que un actor que atraviesa un mal momento cree ser el héroe que protagoniza tras sufrir un accidente en que pierde la memoria.

 


THE MEDIUM (130’)  Banjonj Pisanthanakun. Esta coproducción entre Tailandia y Corea del Sur ha tenido un enorme éxito en taquilla en ambos países, pero también provocó desmayos y ataques de pánico entre algunos espectadores.

Una inquietante mezcla entre falso documental sobre los chamanes; posesiones maléficas y gore. Ingredientes para contar, en palabras del director, una historia de miedo como las de antes.

 


Recuerdo que en algunas salas se proyectará la película de Francis Ford Coppola ,  EL PADRINO conmemorando el 50º aniversario de su estreno.  Una gran ocasión para ver en `pantallas grandes una de las obras maestras de la historia del cine.

CINE EN UN MINUTO: "LAS ILUSIONES PERDIDAS"

 

 


Viendo “Las ilusiones perdidas”(144’) relaciono la historia con “Las amistades peligrosas” ,por ese ambiente sibilino ,cínico y artero   aunque si voy más allá creo que la película de Xavier Gianolli entronca con la actualidad relatando como en el siglo XIX las noticias estaban supeditadas al mejor postor. Los rumores,  las noticias falsas se hacen cómplices del poder , el dinero y la ambición por encima de cualquier planteamiento romántico y honesto.

El realizador francés se ha atrevido a adaptar una de las obras cumbres de Honoré de Balzac , con un joven poeta (Benjamin Voisin)  quien enamorado de la mujer de un aristócrata (Cécile De France) viaja con ella a París, para tratar de publicar su obra.

Rechazado por la aristocracia y la mujer que ama, Lucien , quién cree que el periodismo existe para ilustrar sobre el arte se encuentra con un cínico periodista Etianne (Vincent Lacoste) que le redefine el oficio del informador: “ganar dinero para los accionistas y para uno mismo”.

Criticas compradas, autocensuradas , rumores, intrigas, grupos organizados para conseguir que fracase o triunfe una obra teatral, editores (Gerard Depardieu) que tienen como máxima que “una buena critica es mejor que un mal libro” o escritores que publican con el apoyo interesado de los aristócratas (Xavier Dolan) nos sumergen en una historia apasionante.

En “Las ilusiones perdidas” estamos ante una película de época clásica, pero, como digo, muy actual, sin tecnología, pero si con papel impreso para subir a los cielos o bajar a los infiernos a cualquiera que proporcione pingües beneficios . Todo aderezado con fiestas desmedidas , pasión y sobre todo mentiras y traiciones.

UNA BUENA PELÍCULA, AUNQUE QUIZÁ ALARGA SU DURACIÓN

CINE EN UN MINUTO: "EL TRIUNFO"


 No es la primera ni tampoco será la última película que trate pequeñas o aparentemente imposibles gestas. Basada en una experiencia vivida en una cárcel de Gotemburgo, el director francés Emmanuel Coucol , traslada la acción a un centro penitenciario francés.

Kad Merad interpreta en "El triunfo" (105') a un actor de poco éxito que acepta dar clases de teatro en un centro penitenciario. Poco a poco se establece una estrecha relación entre el profesor y sus peculiares alumnos de los que no conoce su pasado, pero si su capacidad para actuar y memorizar los textos. Sus esfuerzos van dirigidos a que sus actores interpreten “Esperando a Godot”, cima del teatro del absurdo, porque les dice : “Esta obra parece escrita para vosotros , sabéis perfectamente qué supone esperar, no hacéis otra cosa”.

La espera es también conseguir los permisos penitenciarios que permitan a los presos a representar la obra de Samuel Beckett por teatros de toda Francia.

Una historia ya vista  pero con personajes diferentes que buscan en el teatro esa libertad de la que carecen. Un filme pleno de humanismo y esperanza.

ENTRETENIDA

 

CINE EN UN MINUTO: "COMPETENCIA OFICIAL"

 

  
El mundo del cine entre bambalinas. El ego de los actores en esta comedia inteligente y bien realizada por los argentinos Gastón Duprat y Mariano Cohn que ya bucearon en el mundo literario con “Un ciudadano ilustre” y en el caso de Gaston, en solitario, en las artes plásticas con “Una obra maestra”.

En “Competencia oficial” (114'), toda realizada en interiores, Penélope Cruz interpreta a una exitosa realizadora de cine contratada por un rico empresario(José Luis Gómez) que quiere pasar a la posteridad con una obra importante. No hay limites para los gastos y son contratados dos grandes actores para interpretar a los protagonistas interpretados por Antonio Banderas y Oscar Martínez, actor habitual en las películas de Cohn y Duprat.

El método de rodaje, las diferentes maneras de enfocar la interpretación , los egos, las manías, las envidias se desprenden de esta sátira, por momentos muy divertida, en que todos los actores cumplen a la perfección sus papeles incluyendo los secundarios como Irene Escolar, Carlos Hipólito y una irreconocible Pilar Castro, por mor de la caracterización. Unas interpretaciones caricaturescas de una farsa no solo del cine, sino del mundo en que vivimos.

INVITA A PASAR UN BUEN RATO.

 

2/23/2022

PÁGINAS SUELTAS(16) : HUELVA, SIEMPRE UN TIEMPO FELIZ

 

 

Comenzó como Semana antes que Festival

Creo que fue en el 82 cuando mi viaje a Huelva fue una auténtica odisea. Había conocido la ciudad tres años antes. Miguel Ángel C. y yo habíamos sido enviados por la emisora para cubrir el Festival de Cine Iberoamericano que alcanzaba su quinta edición.  Viajamos en tren, en coche cama y después de diez horas de viaje llegamos por fin a la estación. Fue un viaje tan interminable como todos los que se hacían al sur en aquellos años. La experiencia me convenció para que cogiera mi coche, un 127 que se lanzó a la aventura por unas carreteras inseguras , con un Despeñaperros que poco tenía que ver con el que atravesamos en la actualidad. Una compañera de radio y antes de la universidad, María S.R. me pidió que le llevase porque tenía unos amigos en Punta Umbría y quería pasar unos días allí.  

Seguí sus indicaciones porque ella viajaba habitualmente con sus padres y conocía bien la zona. Me señaló en el mapa la sierra de Huelva por la que nos ahorraríamos unos cuarenta o cincuenta kilómetros. Seguí su consejo y pronto me arrepentí. Una carretera estrechísima, curvas y más curvas, precipicios y el disco del embrague que, llegando a Jabugo, ¡¡¡dijo hasta aquí!!!

Allí estábamos un domingo de diciembre, con todo cerrado y sin un alma por las calles. En un bar, sin apenas parroquianos, alguien nos dijo donde vivía el mecánico. Salió un hombre grande, recién levantado de la siesta, con camiseta de tirantes porque frío, la verdad, no hacía. Echó una ojeada, miró por aquí y por allá, y nos aseguró que podíamos llegar a Huelva. Eso sí que si teníamos que parar en algún momento arrancase en segunda. Así fue como continuamos, aunque cuando nos veíamos obligados a detenernos y volvíamos a arrancar, el coche sonaba como una auténtica carraca.

Al final debieron ser más de diez horas de viaje cuando llegamos al hotel Tartessos, donde estaba la sede del festival y donde me alojaría durante toda la semana. A María sus amigos llevaban esperándola desde hacía más de dos horas. Nos despedimos y quedamos en vernos en una semana para regresar a Madrid. A la mañana siguiente me arreglaron el coche que apenas utilicé durante mis días en el Festival y como anécdota se lo presté, por petición de la propia organización del festival que no contaba con vehículos,  a José Luis López Vázquez quien, acompañado por su mujer de entonces, Flor, la actriz Charo Soriano y el crítico Homero Alsina Thevenet, querían conocer los pueblos de la provincia. A lo noche López Vázquez, con fama entre la profesión de no ser muy espléndido,  me devolvió las llaves y me dijo que habían rellenado de gasolina más o menos lo que habían gastado. Sin comentarios. López Vázquez y su mujer, especialmente esta última, serían protagonistas la noche de la clausura a la que acudían las fuerzas vivas con sus mejores galas. Flor debajo de su abrigo llevaba un vestido totalmente trasparente, objeto de todas las miradas. 

Era 1982, los socialistas acababan de llegar al poder, pero la vieja España estaba todavía asentada en muchos lugares. Llevamos muy pocos años de democracia y unos meses antes habíamos asistido al intento de golpe de estado en el Congreso de los Diputados. Huelva mostraba un abierto contraste entre su clase social y política y los entusiastas organizadores y seguidores del Festival que fue todo un referente del cine latinoamericano en Europa, y un lugar al que querían asistir todos los grandes del cine que hablaba español y portugués.

José Luis Ruiz en una foto de hace unos años

Fue aquella edición, la octava,  la que me unió con Huelva a la que volví regularmente durante prácticamente toda mi vida profesional , aunque fuera un par de días . El hotel Tartessos, en Martín Alonso Pinzón, la Gran Vía, muy cerca del ayuntamiento, la emisora de RNE y la plaza de las Monjas , era la sede del festival, el lugar donde dormíamos, comíamos o celebrábamos las ruedas de prensa con figuras del cine de ambos lados del Atlántico. María Félix, Fernando Rey, Paco Rabal, Indio Fernández , Mario Moreno “Cantinflas”, Sonia Braga, Carlos Saura, Juan Antonio Bardem, Luis García Berlanga, Arturo Ripstein, Sara Montiel; o el mismísimo Luis Buñuel , además de escritores como Mario Vargas Llosa, José Saramago, Manuel Puig, Miguel Barnet, Alfredo Bryce Echenique y un larguísimo etcétera de lo más destacado de nuestro cine y literatura. Alfonso Guerra, vicepresidente del gobierno inauguró unos años después el festival en la Rábida y en otras ediciones hubo ministros de Cultura como Javier Solana apoyando el certamen. Las diferencias políticas entre ayuntamiento, gobierno autonómico o gobierno central hicieron que el certamen fuera decayendo con los años estando a punto de desaparecer, pero, afortunadamente, sigue adelante a pesar de todas las dificultades.

En los ochenta y en parte de los noventa fueron sus años de esplendor. El certamen era una auténtica fiesta.

El Tartessos hace ya varios años.

En las primeras ediciones éramos pocos los periodistas que acudíamos. En el Tartessos comíamos en la misma mesa actores, actrices ,productores o directores y charlabas de manera informal con los grandes cuando nosotros éramos todavía muy jóvenes. Esa familiaridad solo la encontré años después en Lleida, en la Mostra de Cine Latinoamericano que tenía como sede el pequeño hotel Real donde compartíamos mesa con Adolfo Aristarain, Federico Luppi, Mercedes Sampietro, Jordi Dauder, José Sacristán…  Otro festival impagable que dirigió desde su inicio en 1995 hasta su desaparición en plena pandemia, Juan Ferrer. También la política ayudó a que la Mostra dejara de existir.

Con Pepe Sacristán en Lleida 

En Huelva recargabas pilas para todo el año. Era una semana frenética en la que trabajabas a todas horas, pero siempre encontrabas hueco para tomarte una cerveza ,unos vinos o unas tapas en los bares y tabernas próximos al cine Emperador que estaba a poco más de 100 metros del hotel. Entre sesión y sesión el “Colombino”, en la esquina de la misma calle invitaba a saborear tapas de gambas al ajillo o coquinas. En el “Bajamar” la tapa estrella eran las angulas, cuando todavía se podían comer sin cargarte el presupuesto, y servidas por Manolo el más frenético y rápido de los camareros . Recuerdo “La Esperanza”, con un patio andaluz en que tapeabas pescado frito o un bar que invitaba directamente a quedar “En la esquinita te espero”. “La taberna del condado” y sus chacinas , “Portichuelo” o el restaurante “Los gordos”, con el lenguado como estrella fueron lugares que frecuentamos entre película y película o entre crónica y crónica…Si se es joven hay tiempo para todo. Recuerdo que José Ramón, “El Lujo”, y yo requisábamos los vales de comida a Elisabeth, ambos compañeros de la radio,  ya que no era muy aficionada a la comida salvo a las gambas y al jamón, ahí había que estar atento porque a poco que te descuidabas el plato se quedaba vacío. Tampoco eran malas sus preferencias.

Aquella primera vez que coincidimos los tres fue porque se decidió que retransmitiéramos la inauguración y la clausura, aparte de realizar programas diarios y cubrir informativos de todas las emisoras de RNE. El festival crecía y REE concedía ya su premio en el que “El Lujo”, formaba parte del jurado. José Ramón es una persona muy divertida, con el que siempre he pasado momentos estupendos en festivales o cuando retrasmitíamos los Goya. Sus criticas cinematográficas crearon escuela en RNE por su tono desenfadado y poco formal. Contaba las películas a su manera y con un par de palabras era capaz de definirte lo que ibas a ver en la pantalla. Un tipo estupendo.

Con Elisabeth y el Mugu en el Ayuntamiento de Huelva

Elisabeth y yo trabajamos siempre en perfecta armonía. Nos complementábamos no solo en Huelva si no en nuestro trabajo en la emisora. Éramos muy diferentes, pero ella ponía cordura y sensatez a mi espíritu más caótico e impulsivo. Fueron varios los años que coincidimos en el Festival que contribuyó a afianzar la amistad que todavía conservamos, aunque apenas nos veamos ya que vivimos en ciudades distintas con nuestras respectivas familias. 


El Festival de Huelva fue una de las señas de identidad de REE y todavía hoy se sigue por compañeros como Teresa Montoro. que, desde hace ya muchos años, es una auténtica especialista en el cine iberoamericano y en general, en todos los temas vinculados con Iberoamérica ya sean políticos, sociales o culturales.

Huelva fue también para mí acercamiento y conocimiento del cine iberoamericano gracias a sui festival y a quiénes lo hicieron  posible  como su director José Luis Ruiz y los que estuvieron en su equipo  Julia Marquínez, Soledad Mora; Vicente Quiroga … Es una ciudad que, en contraste a la decadencia del festival ha mejorado mucho en los últimos años con el paseo junto a la ría y otros lugares que merece la pena visitar en contraste con aquellos lejanos años ochenta con el fuerte olor a celulosa, proveniente de la fábrica cercana y una neblina penetrante que nos acompañaba durante la semana que pasábamos en la ciudad.




Cuando el Emperador se llenaba en el Festival

Por encima de todo Huelva es cine y amistad ,memoria del Tartessos y el Emperador, de amigos como Rafa Terán incansable periodista que promovió y finalmente creó el Centro de Comunicación “Jesús Hermida”, un estupendo museo que el mismo dirige o especialmente del Mugu, fotógrafo de prensa y del festival que no dejó a nadie sin fotografiar. Su cámara le acompañaba siempre, tanto como sus risas. Siempre que regreso, aunque sea por un día,  nos vemos y mantenemos la complicidad de aquellos tiempos en que podías tomarte unos garbanzos con espinacas o un menudo en un bar abierto cuando la ciudad comenzaba a despertar.

Con el dtor. Enrique Gabriel, Sancho Gracia y Carlos Iglesias

Antes, en el “Quitasueños”, en la zona del Muelle del Tinto se tomaban las últimas copas de la noche, en un lugar que nadie te recomendaba, y en el que se entremezclaban marineros, prostitutas, pequeños delincuentes y  amantes de la noche. Pero por encima de todo el “Quitasueños” se convirtió en uno de los referentes del cante flamenco, con cantaores que se arrancaban por fandangos en la madrugada mientras los fantasmas que ocupaban las mesas apuraban sus copas y sus tragos de vida. Más de una noche surgieron las navajas mientras como espectadores asistíamos a las trifulcas que se montaban en el interior del local. Más de una noche fue la policía y más de una noche regresamos, acompañados por el silencio, camino del hotel.  Al despertar no estaba el dinosaurio de Monterroso y si mucha radio y mucho cine.

2/19/2022

PÁGINAS SUELTAS( 15) EL OTRO CARTERO DE ANTONIO SKÁRMETA

 

"Ardiente paciencia". El cartero y Neruda

Conocí a Antonio Skármeta en el festival de Huelva de 1983. En aquella edición el escritor chileno se convirtió en la estrella del certamen porque su película “Ardiente paciencia”, se llevó todos los premios, incluyendo el recién creado de Radio Exterior de España a la película que mejor reflejase la realidad socio-cultural de la comunidad iberoamericana”.

Skármeta estuvo abierto a las entrevistas y a los encuentros con unos y otros, incluyendo los niños porque también escribía libros infantiles y esa cercanía y esa proximidad quedó patente durante el certamen. “Ardiente paciencia”, fue la antesala de “El cartero” que obtendría un enorme éxito internacional, unos años después. Grande, de aspecto bonachón , Skármeta miraba con curiosidad a través de sus lentes. Una enorme facilidad de palabra y una sonrisa que acompañaba sus opiniones. Nada parecía inmutarle.

“Ardiente paciencia” no se estrenó comercialmente en España y pasó desapercibida para la mayoría de la gente. Que recuerde solo hubo un pase en la 2 de Televisión Española, en el programa la “Ventana electrónica”, que dirigía Emma Tamargo y que estaba en la emisora de Huelva cuando se proyectó en el festival. Muchos años después Canal + hizo un especial, no recuerda bien, si sobre Neruda o Chile e incluyó la película
El cartero

“Ardiente paciencia” me pareció mucho más cercana y natural que “El cartero”. Chile estaba en plena dictadura y la película situaba la acción en Isla Negra, donde Neruda tenía una de sus residencias. Allí establecía esa relación tan personal con el cartero que llevaba la correspondencia, incluyendo aquella que le anunciaba el Nobel de Literatura. El cartero utilizaba los versos del poeta para seducir a la chica de que la estaba profundamente enamorado. Cuando Neruda le recriminaba que le plagiara sus versos respondía: “La poesía no es de quién la escribe sino de quien la lee”
Marcela Osorio, seducida por los poemas de Neruda 

Digo que la película me resultaba más cercana porque cuando se estrenó, Chile seguía sufriendo la dictadura de Pinochet. Hacía dos años que nosotros habíamos sufrido un intento de golpe de estado y la acción de “Ardiente Paciencia” reflejaba la situación en Chile tras el golpe militar. Todos los actores eran chilenos empezando por un Roberto Parada, similar hasta físicamente a Pablo Neruda, Oscar Castro, como El cartero y Marcela Osorio, la pretendida .

Isla Negra fueron las costas y mares portugueses donde se rodó ya que era impensable ir a Chile para realizar la película. Antonio Skármeta vivía en aquella época en Alemania Occidental donde estaba exiliado. Allí concibió aquella historia que traspasó fronteras, dio origen a novelas, cine, teatro y hasta una ópera.

Decía que fui el cartero de Skármeta porque cuando ganó en Huelva no lo conocía nadie en nuestro país ,era un auténtico desconocido y las pocas referencias que había en medios de comunicación ,noticias de interés literario o cinematográfico incluso convocatorias literarias se las enviaba por fax o le escribía cartas a las direcciones que me facilitaba y ya posteriormente, cuando regresó del exilio en 1989,  a su domicilio en Cardenal Newman, en Santiago de Chile.


La buena aceptación que tuvo la película, ya digo a niveles reducidos, hizo que un par de años después Plaza y Janés publicase la novela “Ardiente paciencia” en España.

Lo he contado en otras ocasiones, pero la presentación fue minoritaria, aunque muy especial para los que estuvimos. Fue en el antiguo Hotel Sanvy, en la Plaza de Colón, donde media docena de periodistas convocados por la editorial departimos con Skármeta y sus dos presentadores : Mario Benedetti y Miguel Littin. Una conversación distendida que derivó hacia un tema que apasionaba a los tres escritores: el fútbol y al que algunos no los íbamos a la zaga.

Era 1986 y estaba celebrándose el Mundial de México, aquel de los goles de Maradona a Inglaterra, la mano de Dios y el slalom imposible,  y para los españoles el de Butragueño y sus cuatro goles a Dinamarca(5-1) . Creo que aquella tarde había un partido de Uruguay contra Alemania Occidental  y nada más tomar el café se excusaron y salieron camino de sus casas u hoteles para ver el partido .Pero me dio tiempo a que Antonio lo firmara para mis dos hijos mayores. Los otros dos aún no habían nacido.

Un par de años antes, en Huelva, Skármeta  había formado parte de nuestro jurado y como establecimos,  Radio Exterior organizó una comida a la que asistían los miembros del jurado y los compañeros acreditados en el Festival. Mi experiencia en Cádiz, donde mis padres vivían desde hacía más de diez años, me llevó a pedir que nos buscaran una venta , en lugar de meternos en un restaurante que se comiese el presupuesto.
El Paraíso (Huelva Información)

La venta “El Paraíso”, cerca de Punta Umbría fue el lugar elegido y todavía recuerdo a Nora la mujer de Skármeta, de origen alemán,  saboreando las gambas y un fantástico lenguado, cuando todavía se podían comer a un precio asequible.  

Fueron muchos años de relación con Antonio Skármeta del que seguí toda su trayectoria. La relación continúo después del éxito de “El cartero”(1994), la película dirigida por el británico Michael Radford que llegó a estar en la lucha por los Oscar de Hollywood. Su realización  fue un empeño personal del actor Massimo Troisi, quién cautivado por la historia  quiso interpretar el último papel de su vida ya que se encontraba  gravemente enfermo y falleció en vísperas del estreno.


En Buenos Aires  el día en que murió Pinochet.


La última vez que le entrevisté fue en 2009 cuando Fernando Trueba llevó al cine “El baile de la Victoria” que había ganado el Planeta, unos años atrás. Dos años antes,2007, estuve con Skármeta en Santiago de Chile en un ciclo de cine que organicé, en mis vacaciones, vinculado a la emigración y al exilio que me llevó por varios países de América.  Skármeta, que ya me había acompañado en Buenos Aires, participó en la mesa redonda, en el Centro Cultural del Palacio de la Moneda junto al escritor argentino Marcelo Figueras; el chileno Luis Vera y la cineasta española Marta Arribas.

No estuve más allá de cinco días en Santiago, aunque me dio tiempo a visitar Valparaíso y la casa-museo que tenía allí Pablo Neruda. En Santiago comimos con Skármeta en el Café Torres, en la Alameda Bernardo O’ Higgins, uno de los restaurantes más antiguos y clásicos de la capital chilena. No me atrajo Santiago. Me impresionó visitar el complejo de la Moneda o las aguas turbias del río, que recordaba repleto de cadáveres, en películas como “Missing”, de Costa-Gavras. Mi imagen de Santiago era de tristeza, miedo ,persecuciones y desaparecidos y no logré borrar esa concepción todo lo que hubiese querido, aunque hubiesen pasado ya muchos años desde la marcha de Pinochet, quien había fallecido en diciembre de 2006 cuando, precisamente, estábamos en Buenos Aires con el mismo ciclo.  Santiago me pareció una ciudad poco bulliciosa, que curaba las heridas de la larga noche que había padecido. No obstante, la sentía protegida por esos Andes colosales que se vislumbran desde la ciudad. Esa “La cordillera de los sueños”, como la llamó Patricio Guzmán en su documental, protege Santiago de las miradas, pero también aísla a sus habitantes.
Siempre me quedarán sus libros.

Mi salida de la radio y la no excesiva actividad profesional que he tenido desde mi prejubilación me fueron alejando de Antonio Skármeta, del que guardo la amistad que mantuvimos .Siempre apreciaré al apacible escritor, de origen croata, como queda patente en muchos de sus libros, con el que compartí tan buenos momentos.

Hoy  “armados de una ardiente paciencia” como decía Neruda en su discurso de aceptación del Nobel, parafraseando a Rimbaud, queda en la memoria aquella primera vez en Huelva cuando comencé a convertirme en cartero.

2/17/2022

OTROS ESTRENOS 18-2-22 y el Oso de oro para Carla Simón

 

Carla Simón mirando su Oso de Oro(El periódico.com)

 La semana no ha podido terminar mejor con el Oso de Oro a Carla Simón por su nueva película “Alcarrás”, rodada en este pueblo de Lleida con actores no profesionales y que respalda una trayectoria impecable ya que la joven cineasta catalana ganó en este mismo festival el premio de mejor opera prima por “Verano 1993” ,película que como recordaréis obtuvo varios Goya en 2017. “Alcarrás” gira en torno a una familia de agricultores y su apego y amor a la tierra. Se estrenará en cines esta próxima primavera. Desde 1983 en que Mario Camus ganó el Oso de Oro por "La colmena", ningún  otro cineasta español había conseguido el prestigioso premio cinematográfico. Mientras "Alcarrás" llega a nuestras salas, hay además, de “Muerte en el Nilo”, “Primavera en Beechwood” y “La hija oscura” otras películas que llegan a  nuestros cines 


CASATE CONMIGO (112’)


Bastian (Maluma) y Kat(Jennifer López) están a punto de casarse, en una ceremonia multitudinaria en el Madison Square Garden, durante la celebración de uno de sus conciertos . Cuando llega el momento, Kat descubre que Maluma lleva tiempo engañándola, decidiendo no casarse.  Kat, por despecho decide casarse con uno de sus fans (Owen Wilson) un profesor de matemáticas que la diva no conoce de nada. Destacar que Jennifer López a sus 52 años continua en plena forma. Dirige Kat Coiro

CODA(111’)

Coda es la versión de Hollywood de la exitosa comedia francesa, “La familia Bélier

Cuenta como Ruby es la única que puede oír en su familia sordomuda. Cuando el negocio de pesca de la familia se ve amenazado, la joven debe elegir entre su pasión por la música y el miedo a abandonar a sus padres y que no puedan arreglarse por ellos mismos.

Está nominada al Oscar de mejor película, dirigida por Stan Herder e interpretada por Emilia Jones, Marlee Martin, Eugenio Derbez y Troy Kotsur que opta al Oscar de mejor actor de reparto.

 

FLEE (83’)

 

Esta película de animación dirigida por Jonas Poher cuenta como Amin, refugiado afgano ha vivido experiencias terribles y plasma en imágenes la historia emocional por la que ha atravesado.

Sus recuerdos están relacionados con la falta de libertad,  los traficantes de seres humanos y las persecuciones en un país en que su orientación sexual ni siquiera es reconocida.

Opta al Oscar como mejor película de animación, documental y película de lengua no inglesa

AZOR (100’)



Este thriller italiano dirigido por Andreas Fontana relata como Yvan un banquero de Ginebra viaja a Argentina, en plena dictadura militar , para tratar de encontrar a un nuevo socio.

Su antiguo compañero desapareció de forma sorprendente y no hay manera de dar con su paradero. En el reparto figuran Fabrizio Rongione, Stephanie Cléanu y Carmen Iriondo, entre otros.

 

PRIMAVERA EN BEECHWOOD: Pérdida, pasión y literatura


Otra realizadora, la francesa Eva Husson dirige una historia muy británica en “Primavera en Beechwood(105’), que vuelve a acercarnos a dos realidades paralelas la de los aristócratas y sus criados, es decir los de “arriba y los de abajo”.

La acción se sitúa en 1924 en la campiña británica. El matrimonio Niven que forman Colin Firth y Olivia Colman viven en su inmensa mansión solo con la presencia de los criados porque sus dos hijos murieron en la I Guerra Mundial. Un lugar frio y formal en que solo muestra su sonrisa la criada Jane ( Odessa Young) , casi analfabeta pero amante de los libros que se convertirán en imprescindibles en su vida.

Jane es amante de Paul (Josh O’ Connor) pero este debe casarse con Emma (Caroline Harker),perteneciente como él a la aristocracia inglesa. El Día de la Madre es el previsto para formalizar el compromiso y las familias organizan un picnic aprovechando el buen tiempo. Paul y Jane se citan en la casa del primero para dar rienda suelta a su pasión sabiendo que puede ser el último día que estén juntos, porque en unas horas Paul formalizará su compromiso. Las criadas solo tenían un día libre al año.

Basada en la novela de Graham Swift, “El domingo de las madres”(Anagrama) explora el sexo y la intimidad y se aleja de los corsés de otras producciones con aroma británico que no van más allá de las palabras . Es una película con un enorme lirismo poético, que trata de la pérdida, el sexo, el deseo, o la determinación de una mujer capaz de hacerse así misma en una época muy difícil para ella. Es un drama de época que se desarrolla durante los años veinte pero que nos muestra en décadas posteriores a la evolución de Jane hasta convertirse en escritora. En los años noventa Jane está interpretada por al gran Glenda Jackson.

NO DEFRAUDARÁ.