7/14/2011

¡¡¡¡¡14 DE JULIO¡¡¡¡¡ : VIVE LA FRANCE

El chauvinismo es sinónimo de francés pero por aquí, por estos lares no nos vendría nada mal que el apelativo nos lo aplicaramos de vez en cuando. Sobre todo cuando hablamos de cine. Da gusto como los franceses han sido capaces de defender su cinematografía frente a la apisonadora de Hollywood.Todos los años nos regalan un puñado de excelentes películas que han nacido gracias a las medidas proteccionistas que tienen el estado frances frente a las multinacionales.
Gracias a ello podemos ver películas como "El caso Farewell", una historia de espionaje, en el más puro estilo de las novelas de John Le Carré, pero sustentada en hecho reales . "El caso Farewell" fue un acontecimiento transcendente de la  Guerra Fría, porque las consecuencias que tuvo supuso nada más y nada menos que la caída de la Unión Soviética y todo el bloque comunista de los países del este de Europa. Cuenta la historia de un espía soviético,desencantado con el régimen comunista, que se dedica a pasar información a un diplomático francés que, a su vez, se la transmite a su gobierno y de  paso a los Estados Unidos de Reagan. La Unión Soviética dedicaba el 40 por ciento del presupuesto de Defensa al espionaje y tenía todo absolutamente controlado.
La película está dirigida por Christian Carion ("La chica de París") y tiene como actores protagonistas a dos directores: Guillaume Canet, al que tenemos en cartelera por su "Pequeñas mentiras sin importancia" y Emir Kusturica,director suficientemente conocido en nuestro país por títulos como
"Papá está en viaje de negocios", "Underground", "Gato negro, gato blanco" o "La vida es un milagro".

Pero la riqueza actual del cine francés le permite construir una historia de espionaje; comedias de amor,amistad o simplemente de relaciones humanas como "Cena de amigos o "Pequeñas mentiras sin impoirtancia" o historias de adolescentes o preadolescentes como "Stella", dirigida con sensibilidad y realismo por Sylvie Verheyde. Cuenta la historia cotidiana de una niña de 11 años que trasmite con naturalidad a los espectadores, los cambios que va experimentando. El paso de la infancia a la adolescencia.La dificultad y al mismo tiempo la belleza de descubrir, de crecer en un viaje iniciático ,ambientado a finales de los setenta,. aunque muy bien podría haber sido una historia de nuestros días.
Las dificultades en los estudios; las relaciones familiares; la rebelión; la amistad;los primeros libros; el primer amor...Todo está narrado con absoluta sencillez  y descubrimos la fragilidad de una niña pero también esbozamos la determinación con la que va a afrontar su futuro.

Cine francés para el mundo ojalá podamos decir algún día lo mismo del cine español.

7/11/2011

CAFES DE ANTAÑO.CAFES DE SIEMPRE





Siempre me he preguntado si los cafés literarios nacieron por necesidades imperiosas de comunicación de nuestros artistas o porque nuestros hombres de letras o pintores buscaban refugio para huir de los fríos inviernos.
Allí en el café y en torno a una mesa, se apretujaban tardes enteras jóvenes artistas insolventes que limitaban su consumición a unos cuantos cafés e inagotables vasos de agua, a la espera de encontrar  algún prócer  que pagase la consumición al que, previamente, alimentaban su ego ,solicitándole que recitase tal o cuál poema con el que había ganado unos juegos florales, o pidiéndole que pronunciara un soporífero discurso como ocurre, por ejemplo, con el D. Ibrahim de “La colmena”, de Camilo José Cela, que en la pantalla  interpretó el inolvidable Luis Escobar, bajo la dirección de Mario Camus.

Pero antes de aquellos cafés de los años cuarenta o cincuenta, entendiendo café en el más amplio sentido de la palabra, porque también determinados restaurantes han sido refugio de intelectuales, a finales del siglo XIX comenzaron  a proliferar por Madrid y otras ciudades como Barcelona numerosos locales que acogían a gentes variopintas que, además de relamerse con una taza de humeante café, animaban a la tertulia  tanto de lo humano como de lo divino. Se podía hablar e incluso conspirar sobre los gobiernos de turno, pero también las charlas trataban del buen comer, de amores y desamores; del mundo de los toros  y si nos situamos en nuestros tiempos de los éxitos o fracasos de los equipos de fútbol.

 En los cafés  se hablaba y se habla de todo. Si pusiéramos un micrófono en aquellas tertulias del Café de Pombo, Casa Leopoldo, Las Siete Puertas o el Café Gijón, seguro que no solo escucharíamos análisis trascendentes sobre determinados temas, y si mucho de lo cotidiano, del día a día de personajes de la vida política o cultural.

Las tertulias televisivas y radiofónicas


Esa fórmula de las tertulias ocupa momentos destacados en las programaciones de radio y televisión desde los años noventa, y en ellas se dan cita periodistas, escritores o políticos. Comentaristas de la actualidad que, sin ningún rubor, te hablan tanto de la ley del aborto, como de la crisis en Irán o los triunfos del Barça. Todos los temas entran en esas tertulias, seguramente, como antaño, lo que ocurre ahora es que quedan grabadas, y en la mayoría de los casos dejan mucho que desear. A veces se convierten en un gallinero, donde todos hablan al mismo tiempo y  a ver quién lo hace más alto. Hay una cierta agresividad buscando una mayor complicidad del  espectador o radioyente con uno u otro contertulio.
Sin embargo, no llega la sangre al río como ocurriera con D. Ramón María del Valle Inclán que perdió un brazo como consecuencia de una disputa en el Café de la Montaña, en la Puerta del Sol de Madrid, pero sí alguno de los contertulios ha perdido más de un juicio por difamación  u otras faltas de parecidas o similares características

Dejando atrás las tertulias de nuestro tiempo,Mariano José de Larra, “Fígaro” decía de los cafés que “no hay uno bueno; son habitaciones que se hicieron para todo, menos para cafés, ahogadas mezquinas y totalmente inadecuadas para sus fines”. También era muy crítico Gregorio Marañón sobre los clientes de los cafés a los que llamará “monstruos anónimos y terribles”, y en particular refiriéndose a Unamuno y Pío Baroja que no gozaban de sus simpatías decía: “el hombre de café es, entre otras cosas, manantial inagotable de resentimiento”.
Claro que D. Gregorio también tuvo su respuesta por parte de uno de los más asiduos clientes de los cafés, y propulsor de la tertulia del Café de Pombo, Ramón Gómez de la Serna: “Lo que a Marañón le ha faltado en la vida es más café”.

Si bien la eclosión de los cafés en Madrid la situamos a partir de la segunda mitad del siglo XIX, hay ya  durante el siglo anterior  antecedentes que los escritores costumbristas sitúan en la Fonda de San Sebastián, y en un local de la plaza de Santo Domingo.

El periodista y cronista oficial de la Villa de Madrid, Angel del Rio, en su libro “Los viejos cafés de Madrid”, dice que al permitirse la estancia prolongada en los cafés, a diferencia de las botillerías que sólo eran lugares de paso, “ se dio pie a que se conversara con tranquilidad, a que se discutiera apasionadamente, y a que a los ociosos que se pasaban media vida en estos locales, se les llamara en el argot castizo pierdetempistas”. Así nacieron las tertulias, los grupos de conversadores, las charlas(…)


CAFÉS LITERARIOS


El caso es que los cafés literarios constituyen por si mismos todo un reclamo turístico. Conservamos sus imágenes gracias al cine o a la composición que nos hemos hecho de ellos en nuestras lecturas e imaginamos donde se sentaba tal o cual escritor, o donde explicaba los trazos de su última obra cualquier artista. Llegamos a las ciudades y en todas las guías hay referencias a establecimientos de estas características.
En Venecia el Florián; en Buenos Aires, Tortoni, en Lisboa,  Chiado, en México D.F, el Tupinamba, y en París una larga lista desde que la capital francesa fuera la capital del mundo primero antes de las dos guerras mundiales, y posteriormente al termino de ambas contiendas con la aparición  de movimientos como el existencialismo.
El bulevar de Saint Germain-des –Prés- fue lugar de encuentro de intelectuales como Albert Camus  o Julio Cortázar. Sus cafés como el Flore vieron nacer,el existecialismo, una de las corrientes filosóficas más importantes del siglo XX de la mano de Simone de Beauvoir y su inseparable compañero Jean Paul Sastre, y justo enfrente, un café con el que ha mantenido una gran rivalidad “Les Deux Magots”,  por el que pasaron desde antes de la década de los cuarenta  Oscar Wilde, James Joyce, Hemingway o Picasso


MADRID Y SUS CAFES

Hubo en tiempo en que en Madrid había tantos cafés como ahora sucursales bancarias. Estás últimas han ocupado los lugares de los viejos cafés de los que muy pocos perviven en la ciudad. Fueron, como hemos visto, lugares de tertulias literarias, artísticas, políticas o taurinas.
Cafés como “El colonial, Fornos, Pombo , Gijón o La flor y nata”. Este último era uno de los que más frecuentaba Ramón María del Valle Inclán, incondicional seguidor  de las tertulias , como ocurrió también con Ramón Gómez de la Serna, animador de la vanguardia madrileña y que hizo famoso al Café de Pombo, y en particular a su sótano, “La cripta de Pombo”, donde se celebraban desde 1915 reuniones a las que asistían, entre otros, Tomás Borrás, José Bergamín, Gutiérrez Solana o Rafael Cansinos-Assens .
Asi nació, en Pombo, escribe Miguel Pérez Ferrero, en su libro “Tertulias y grupos literarios·,la tertulia más multitudinaria, chocante, divertida, atractiva, extravagante y a pleno humo, el de las cachimbas y los cigarros, literaria, exclusivamente literaria, que nunca había existido en Madrid, y que tenía, ni había tenido parigual, nos atrevemos a afirmar, en ningún lugar de nuestro planeta.”.
El café de Pombo, situado en la calle Carretas, fue  para muchos un parlamento literario, un lugar  obligado para los amantes de las letras.
Hoy ya no queda nada. Sólo el cuadro con el  que Gutiérrez Solana inmortalizó a algunos de los primeros contertulios

Si quedan el Comercial, en la glorieta de Bilbao y el de Oriente, en la plaza del mismo nombre. pero sobre todos está el Café Gijón, en el Paseo de Recoletos, que ha sobrevivido a todos los especuladores y a todos los avatares de la historia.
Se inauguró el 15 de mayo de 1888, fiesta de San Isidro, patrón de Madrid. Lo fundó, un  asturiano, Gumersindo Gómez, emigrante en La Habana que, a su regreso, quiso, con la creación de este local, perpetuar el nombre de su ciudad de origen.
La I Guerra Mundial hizo que el Café Gijón se convirtiera en un  lugar asiduo para tertulias políticas y de otra índole, que le dieron gran fama. Se dice que la mismísima Mata Hari se sentó en sus sillones, y que entre los primeros que lo frecuentaron estaban José Canalejas, Santiago Ramón y Cajal y Benito Pérez Galdós

Al término de la Guerra Civil, y cuando la mayoría de los cafés clásicos ya habían desaparecido, el Gijón se convirtió en cita obligada de las gentes de la cultura como Jardiel Poncela, Gabriel Celaya, Gerardo Diego, Antonio Buero Vallejo, Carmen Laforet, Ignacio Aldecoa, y Camilo José Cela.
En 1951 Fernando Fernán Gómez  fundó el premio de novela corta “Café Gijón”, que en su primera edición  ganó uno de sus habituales, César González Ruano.
Posteriormente también fueron clientes asiduos Francisco Umbral,Manuel Vicent .el humorista José Luis Coll y en la actualidad Arturo Pérez Reverte.
Es el Gijón, un café que tiene un  pequeño rincón en la historia de España como, de alguna forma, queda reflejado en la placa conmemorativa que recuerda su centenario:

                                 En los cien años
                                 del Gran café Gijón
                                 desde hoy declarado
                                 Gran Café de la Historia de España
                                 por todas las ideologías, artistas,
                                 escritores, músicos, actores,
                                 bohemios y profesiones varias.
                                 El tiempo en el espacio entre
                                 nuestros recuerdos .No destruyamos
                                 nunca el tiempo y los recuerdos que viven
                                 en este recinto.
                                 ¡Larga vida a esta cátedra de
                                   Humanidades y Letras!
                                     
     
BARCELONA Y SUS CAFES

En Barcelona  más que los cafés han sido los restaurantes los tradicionales lugares de encuentros de intelectuales, escritores y  artistas . Ciento setenta y tres años de vida contemplan a Les set  portes  (Las siete  puertas) que fundara en 1836 Josep Xifré i Cases, considerado el catalán más rico de la época.
Hizo construir las llamadas casas de Xifré en el Paseo de Isabel II, siendo él mismo el inspirador de los planos siguiendo el modelo parisino.
Instaló  allí su domicilio y sus oficinas  pero también un  café de lujo. El local tenía siete puertas y su primer responsable, Josep Cuyás lo llamó “Café de las 7 puertas”.
Tras una serie de modificaciones y nuevos propietarios es en 1929 cuando el matrimonio Morera cambia la denominación de café por restaurante, y se convierte casi desde su inicio en reunión habitual de políticos, periodistas, escritores y artistas.
Sin embargo, no es hasta 1942 cuando el restaurante es adquirido por Paco Parellada, un conocido restaurador de la época, que consiguió que el local fuese un negocio familiar que  ha traspasado a hijos, nietos y biznietos.
En el local queda constancia de quienes se sentaron  y degustaron su extensa carta de cocina catalana. Quedan placas inmortalizando  a reyes ,políticos, cientificos (Alexander Fleming), escritores (Lorca, Alberti, García Márquez, Cela) ,cineastas (Harrison Ford,Catherine Deneuve,Woody Allen,Lauren Bacall, John Wayne o Ava Gardner) ,músicos(Mompou,Lou Reed) y hasta revolucionarios como el Che Guevara.

Otro local emblemático de Barcelona es “Casa Leopoldo” que se fundó en 1929 coincidiendo con la Exposición Universal. Han trascurrido ochenta años y el restaurante sigue siendo una cita obligada para los amantes de la buena mesa, y en muchos momentos de la fiesta de los toros
Manuel Vázquez Montalbán, uno de sus más asiduos clientes  decía: “vengo de parte de Pepe Carvalho y pongánme lo que ustedes quieran”.Y es que las aventuras detectivescas de Pepe Carvalho y sus amigos Charo y Biscuter,entre otros, tenían siempre referencia a esa casa de comidas emblemática.
Xavier Más de Xaxás, en un artículo publicado en La Vanguardia hace unos años   escribió:  Manuel Vázquez Montalbán, el Perich, Joan de Segarra,Juan Marsé, entre otros, abrían ventanas desde las páginas de “Por favor” y, después de escribir, comían y se emborrachaban en Casa Leopoldo”
El restaurante ya era literario, además de torero y farandulero”.
Y es que los citados,además de Eduardo Mendoza, Maruja Torres, Terenci Moix, o Jaime Gil de Biedma, quién le escribió algún poema al restaurante, eran muy poco taurinos, por no decir nada, y a pesar de ello comentaron que Casa Leopoldo situado en pleno barrio del Raval  “consiguió integrarles incluso a los que tenían una actitud hostil, hostilísima ante la fiesta”.
El restaurante está regentado desde 1936 por la familia Gil. Actualmente Carla, hija de Rosa y el torero José Falcón, que murió en la Monumental de Barcelona en 1974, ha tomado el relevo de su madre y sigue haciendo de este establecimiento un lugar mágico donde degustar su excelente carta y sentir  la presencia de algunos de los grandes escritores de la literatura catalana y española  del siglo XX, y lo que llevamos del actual. “Casa Leopoldo” como escribió alguien “es una de las patrias de nuestro esencial mestizaje”

Tampoco hay que olvidar aunque sea brevemente  Els Quatre cats (Los cuatro gatos) situado en el Barrio Gótico y que fundado en 1887, fue local que reunió a artistas bohemios e intelectuales del movimiento modernista, como el músico Isaac Albéniz, el arquitecto Antoni Gaudí ,o los pintores Pablo Ruz Picasso o Santiago Rusiñol quienes colgaron en sus paredes sus primeros cuadros, incapaces de saber todavía el valor que iban a alcanzar con el paso  de los años.

CAFES DE HOY EN DIA

Junto a éstos restaurantes, éstas casa de comidas que perviven en la actualidad también se puede comer o cenar en el café literario Salambó, en el Barrio de Gracia, y que regentan la agente literaria Carmen Balcells y el escritor Pedro Zarraluki. El ambiente se presta a la tertulia y lo frecuentan habitualmente gentes de letras. Anualmente concede un premio literario que ha conseguido un  sólido prestigio. Lo ganó por primera vez, en 2001, Javier Cercas con Soldados de Salamina, y posteriormente han engrosado la nómina de ganadores Cristina Fernández Cubas, Alvaro Pombo, Javier Marías y Roberto Bolaño, entre otros.

Premios literarios, tertulias, fiestas de la cultura. Lugares donde alimentar el cuerpo y el espíritu. Degustar un buen café, un arroz negro, unos callos o excelentes caldos tintos, blancos o rosados . Abrir las páginas de un libro como en Laie, café/ librería en Barcelona, o la Buena vida, en Madrid ; sentir que de alguna manera en estas ciudades tan masificadas podemos todavía encontrar rincones donde aislarnos del mundanal ruido.
Murieron,ya lo hemos dicho, la mayoría de los viejos cafés, pero hay otros que han nacido como el de Ruiz,en el barrio madrileño de Malasaña, el Barbieri, en Lavapiés, o el Central en la plaza del Ángel .Sonidos, murmullos, charlas, y en algunos casos tertulias del pasado que recuperamos en un siglo que aún no tiene la mayoría de edad.



Eduardo Moyano

Fotos: Rocío Moyano y Francisco Maestre

BOSNIA: EL HORROR DE AYER


 Cuesta reconocer que hace tan solo unos años miles de personas murieron asesinadas en una guerra étnica, religiosa, política o como cojones queramos denominarla, que golpeaba, ante nuestra indiferencia, a la Europa del bienestar.  Yugoslavia, la amalgama de nacionalidades refundida por Tito, se convitió en un reguero de sangre porque al parecer cada uno de sus habitantes debía tener su propia identidad.

Alguien o algunos comenzaron a moverse por la senda del odio y lo que durante muchos años fue una convivencia pacífica en la que no existía origen étnico o  religión saltó por los aires sin que los vecinos de la rica Europa, ni siquiera el amigo americano se dignasen  decir nada . La pacificación de las fuerzas de Naciones Unidas llegó tarde. Cuando las cunetas y los campos estaban llenos de cadáveres y el odio se había instalado en cada rincón.Cuesta desgranar todo aquello y el cine ha contribuído y sigue haciéndolo al relatar lo que ocurrió a finales del pasado siglo y éste,cuándo
acababa de comenzar.

Acabo de recordar aquella carnicería con "Cirkus Columbia", la última película de Danis Tanovic que, con tono agridulce, nos lleva a los prolegómenos de la guerra de Bosnia-Herzegovina. En un pequeño pueblo cada hombre, cada mujer se preocupa por el día a día, como en cualquier otro lugar, pero los políticos,corruptos, están  avivando la llama olvidada del odio. Eran croatas,musulmanes, serbios,cristianos o ateos.Da igual. Se puede convivir. Pero siempre hay algún factor que acaba  con cualquier tipo de convivencia.
La película llegará a las salas comerciales uno de estos días y se suma a otros titulos vinculados a la guerra de Bosnia como "Antes de la lluvia", "Karaula", "Grbanica" que a través de un personaje femenino,recuerda las miles de violaciones que sufrieron las mujeres durante la guerra; o titulos de Emir Kusturica como "Underground" o "La vida es un milagro". Películas,éstas últimas, que demuestran la necesidad de contar lo que ocurrió aunque se utilize un tono sarcástico o que caricaturiza el entorno de la guerra.
Lo hizo también el propio Tanovic con "En tierra de nadie" donde a través de dos soldados,uno bosnio y otro serbio delimita la guerra , su entorno y la postura individual, que en el fondo representaba a los miles de habitantes de la zona, de los dos protagonistas.


También el cine europeo ha mirado aquella guerra con titulos como "Radio West",del italiano Alessandro Valori y en la que cuenta como tres italianos, tres jóvenes que han dedidido ir a kosovo en una misión de paz se dan ncuenta del sufrimiento y el dolor que provoca una guerra. También se acercó al conflicto el británico Michael Winterbotton con "Bienvenidos a Sarajevo" o incluso el español Gerardo Herrero que llevó al cine la novela de Arturo Pérez Reverte, "Territorio comanche".

Aquella mirada a la guerra de Bosnia se hizo a través de los corresponsales de guerra  algo que también ha utilizado Hollywood en alguno de sus titulos como "Las flores de Harrison" o "La sombra del cazador".

Algunas de estas películas no tienen gran calidad cinematográfica pero si la ventaja de que llegan al gran público, a un mayor número de espectadores que por ejemplo, la excelente "Cirkus Columbia"...Que actores y actrices de primera fila como Richard Gere,  Andie MacDowell o incluso Dennis Quaid en "Savior" tomen partido, es decir,que sean capaces de transmitir los horrores del conflicto a los espectadores es un hecho importante.
Hace muchos años,"los puristas", criticaban "Missing" de Costa Gavras porque era una visión de Hollywood sobre la represión de Pinochet. Creo que las actuaciones de Jack Lemmon o Sissy Spacek y la repercusión que tuvo aquella película ayudó a que el mundo supiera como se la gastaban los militares en Chile.

Yo creo que aquella película ayudó a salvar vidas y que Pinochet y sus secuaces acabasen siendo juzgados y encarcelados. En la antigua Yugolavia quedan pocas vidas por salvar pero el cine de Hollywood  y por supuesto el de cineastas como Tanovic han ayudado a que Karadzic o Mladic hayan dejado de ser impunes .

7/03/2011

PANTALLA MULTIÉTNICA


A pesar del retorno de muchos inmigrantes a sus países de origen, como consecuencia de la crisis económica, su presencia en el cine español se ha hecho cada vez más habitual en estos últimos años .La progresiva llegada de inmigrantes a España, a mediados de los años noventa, hizo que nuestros cineastas se preocupasen por esta presencia y las diversas reacciones que se produjeron en la sociedad española. Al mismo tiempo ese continuo flujo migratorio procedente sobre todo del Magreb; el África Subsahariana, el Este de Europa y algunos países latinoamericanos sirvió para que revisásemos nuestra propia historia y fuéramos conscientes de que habíamos sido un  país de emigrantes y que solo la bonanza económica, que se truncó con la crisis, nos privó de aquella condición.
VIAJES A ALGUNA PARTE
Los emigrantes forman parte de la historia del cine.  Desde sus orígenes, el séptimo arte ha  dejado constancia de la aventura que han protagonizado millones y millones de hombres y mujeres que han buscado, en otros países, mejorar sus condiciones de vida saliendo de la pobreza o consiguiendo la libertad que se les negaba en su tierra de origen.
Hollywood ha plasmado la odisea de los emigrantes en uno de sus géneros por excelencia, el western, con títulos como “Caravana de mujeres”, que podría tener su parangón en nuestro cine con “Flores de otro mundo”, de Iciar Bollain o “La conquista del oeste”, pero también en otros muchas películas en que los realizadores, gran parte de ellos de origen europeo, han querido dejar constancia de sus raíces. Chaplin, Ford, Kazan, Copolla, Leone o Scorsesse, son algunos de esos grandes cineastas que han incorporado la emigración a la pantalla grande. También el cine independiente en Estados Unidos se ha hecho eco del fenómeno migratorio e incluso cobró fuerza el llamado cine chicano que refleja la emigración centroamericana y mexicana a la mayor potencia del mundo.
El cine europeo, como el chicano, adoptó una línea más social en su valoración de las corrientes migratorias y realizadores como los franceses Bertrand Tavernier, Robert Guédiguian o André Techine, el italiano Gianni D’ Amelio, los belgas Dardanne, el alemán Fatih Akin o los británicos Michael Winterbotton, Ken Loach o Mike Figgis han constatado una realidad que, en el caso de estos países se ha hecho más patente que en España, ya que muchos inmigrantes, hoy ciudadanos de pleno derecho, pertenecen a la segunda o tercera generación.
España:memoria y presente.
Ha tenido que ser la llegada de los inmigrantes la que ha reactivado nuestro pasado. En el cine español ,hasta la democracia, apenas se ha constatado ni el exilio ni la emigración económica. A diferencia de otras cinematografías que han sufrido dictaduras como son los casos de Chile y Argentina, el cine español vivió su exilio casi en silencio. Sólo “En el balcón vacío”(1961), Jomi García-Ascott narró ,de alguna manera, la presencia de nuestros exiliados durante la dictadura franquista en México. Tampoco la emigración económica de los sesenta encontró hueco en nuestras pantallas. La censura se encargaba de que los españoles vieran con humor los muchos problemas que sufrieron nuestros emigrantes en países como Francia,Suiza o Alemania  (“Vente a Alemania,Pepe” de Pedro Lazaga) o que tuviesen una mínima expresión crítica (“Españolas en París”, de Roberto Bodegas). Desde mediados de los noventa  han sido varias las películas que han recordado nuestra presencia en Europa como “El techo del mundo”, de Felipe Vega; “Un franco,catorce pesetas”de Carlos Iglesias y el excelente documental “El tren de la memoria”,de Marta Arribas y Ana Pérez que describe, con sus protagonistas, las difíciles condiciones de vida que tuvieron que soportar los emigrantes españoles en Alemania.
No obstante hay dos grandes películas que narran la emigración interior, la que se produce en España de finales de los cuarenta a los primeros sesenta. Se trata de “Surcos”, de José Antonio Nieves Conde, una película que describe como ninguna otra la indefensión de los hombres del campo en la gran ciudad, y toda la corrupción que se generaba en aquellos años; y  “La piel quemada”, de Josep María Forn que nos introduce en la Costa Brava, en los primeros años del turismo, y la llegada de mano de obra procedente de las regiones más depauperadas de nuestro país.
PATERA Y MUERTE
Pateras,cayucos, ¿cuántos hombres y mujeres han perdido la vida intentando alcanzar las costas españolas? No sabremos nunca la cifra exacta. Sabemos que algunos murieron en el mar y que otros, jamás aparecieron.”Las cartas de Alou”, de Montxo Armendáriz; “Bwana”, de Imanol Uribe, “Said”, de Llorenç Soler o la más reciente “Retorno a Hansala”, de Chus Gutiérrez ahondan en la tragedia y en la supervivencia. En este sentido “Retorno a  Hansala” nos lleva a los orígenes de la inmigración. Las condiciones que se dan para que unos jóvenes dejen su aldea y se embarquen en un aventura de incierto futuro. Es una excelente película que no tuvo la promoción deseada, ni los premios que hubiera merecido. No ocurrió lo mismo con “14 kilómetros”, de Gerardo Olivares, primera película española en conseguir la Espiga  de Oro en Valladolid, y que también viaja a los orígenes para conocer las inquietudes de tres jóvenes que tienen como meta alcanzar  la costa española. Algo similar a lo que ocurre en Francia y Gran Bretaña con el canal de la Mancha de por medio y que en 2009 dio como resultado ,“Welcome”,película del francés Philippe Lioret que narra la aventura de un joven kurdo intentando alcanzar la costa británica .
INMIGRANTES sin MALETAS
Siguen llegando con  lo puesto y sobreviven en nuestra sociedad. España ha dejado de ser rica y se compite por un puesto de trabajo. Hace años lo contaban ya Enrique Gabriel con “En la puta calle”,Alex Calvo-Sotelo en  “Se buscan fullmontis”  o José Antonio Quirós en “Pídele cuentas al rey”. Veíamos tangencialmente a los inmigrantes en ¿Hola estás sola?, de Iciar Bollain, “Tapas”, de José Corbacho y Juan Cruz  o  “París-Tomboctú”, de Luis García Berlanga.
España ya no es una isla en Europa. Hace años que nos integramos y a pesar de las dificultades económicas por las que atravesamos formamos parte de esa sociedad del bienestar. No llegarán tantos inmigrantes pero lo seguirán haciendo porque buscan huir de la miseria y encontrar la tierra prometida. Lo ha contado en 2009 el veterano  Costa Gavras con “Al este del Edén” una fábula sobre la paradisíaca Europa y como los inmigrantes son utilizados laboral, social o incluso sexualmente.  En “Rabia”, la producción española  dirigida por el ecuatoriano Sebastán Cordero, que ganó la última edición del Festival de Málaga, hay una metáfora sobre la inmovilista ,cerrada y claustrofóbica sociedad occidental y  la imposibilidad de integrarse a quienes buscan formar parte de ese mundo. Hay un grito de impotencia y desesperanza. Tanto o más que el planteado por el serbio Goran Paskaljevic en la inquietante y desalentadora “Honeymoons”, otro de los estrenos en España en 2010,donde un clima de intolerancia ,odio  e insolidaridad se extiende por diversos países europeos.
A pesar del tono pesimista de las películas que han abordado el tema de la emigración en estos últimos años ,dejemos una puerta abierta a la esperanza. El cine nos lo seguirá contando.

REVISTA AIGSE . 4º trimestre 2010

ESPAÑA YA NO ES DIFERENTE.ESPAÑA ES CULTURA

Cultura.”Spain is culture”. Lo crean o no, España se abre al mundo a través de su cultura y no por mor de choriceos y corrupción. La ministra Sinde presentó en el Reina Sofía un portal que pretende abrir al mundo nuestra cultura. Nuestro patrimonio cultural, el contenido de nuestros museos, una agenda cultural ordenada, etc permiten al visitante del portal (www.cultura.gob.es) acceder a los cinco millones de fichas descriptivas de obras de arte que contiene y a los más de veinticuatro millones de imágenes.
Este portal hace que no seamos diferentes, que estemos abiertos al mundo y que nuestra cultura esté al alcance de todos. Solo unas horas después la ministra Sinde vió como la guardia civil desarticulaba una trama que desviaba fondos de la SGAE(Sociedad General de Autores) a través de empresas privadas. Como resultado más de una docena de personas detenidas con el presidente de la SGAE, Teddy Bautista a la cabeza. La ministra ha declarado que “el primer objetivo es que se esclarezca y que por encima de todo solo puede tener respeto por la decisión judicial”.
Eso que se esclarezca y que sepamos si los 400 millones de euros que supuestamente faltan han engordado o no el patrimonio de unos pocos a costa de quienes creen en la creación y confían en la gestión de una entidad. Resulta que en esto no hemos cambiado. Que pegas una patada y salen “chorizos” de todos los rincones. ”Los listos” y los corruptos se siguen riendo ante nuestras propias narices y se burlan de cualquier crisis. “Ellos” siempre han ido a 120 aunque a los demás nos rebajasen los límites a 110.
La cultura siempre nos ha hecho más libres pero la corrupción socava los cimientos de una sociedad y hace poco creíble todos los buenos propósitos. En el mundo de la cultura si no te prohíben te roban.
Hace unos días me comentaba el director de una escuela de escritores que ahora se busca la formación integral de los mismos. Es decir, que junto al aprendizaje de la técnica literaria aprendan a defenderse cuando firman un contrato. Y es que acabar una novela no es el final es el principio porque del tipo de contrato que hagas depende tu futuro.
Antes te prohibían  o te mandaban a la cárcel por pensar ahora creas para engordar las cuentas de otros. Sigue siendo triste. No sé si irme a la China para ver “La fundación de un partido” sobre el nacimiento del comunismo en el país más poblado del mundo. Los chinos no pueden quedarse sin ver a Mao y además tendrán que alabarlo porque la censura prohíbe las malas críticas. La taquilla, ni que decir, asegurada, porque se proyecta en la mayor parte de las 6.000 salas con las que cuenta el país.
Puede ser una idea. A este paso aquí vamos tener prohibido que haya malas críticas a la corrupción.

EL AMBIGU.LA VOZ DE CADIZ.4-07-2011

SE NECESITAN ESPECTADORES



Se buscan clientes. No se necesita experiencia'. El otro día me topé con este cartel en un quiosco de Triana. El dueño buscaba más que aficionados a la 'cervecita', debutantes en una relación que dura toda la vida, hasta que el médico te separe.
Esa búsqueda de 'clientes' se expande por todos los ámbitos. No hace falta tener experiencia para caer en una hipoteca para toda la vida; para casarte o ni siquiera para leer un libro, visitar una exposición o ir al cine. No se nace con experiencia. Se aprende. Nuestras gentes de la cultura, los que mueven el 'cotarro', deberían aplicarse el cuento, y colocar carteles por todas las ciudades del denominado estado español. 'Se necesitan espectadores. No se necesita experiencia'. A nuestro cine le iría fetén. ¿Se imaginan que alguien se acercase a ver una de nuestras películas sin que apareciera Santiago Segura como álter ego de Torrente? Resulta impensable viendo los resultados en taquilla de la saga del casposo personaje que ha competido con Hollywood y con esas otras sagas que incluyen piratas del Caribe o cualquier otro mar. El cine es marketing. Una buena campaña hace que poco importe el trabajo de creación. Puedes ver excelentes películas que si no son respaldadas se quedarán 'sin clientes'.
En los últimos días he visto algunas que deberían atraer a veteranos y noveles, pero es difícil. Por ejemplo, 'Naufragio', del donostiarra Pedro Aguilera es, cuánto menos, una película diferente. No trata la inmigración desde el realismo social. Su mirada comulga más con el realismo mágico y con el miedo a la diferencia, a la presencia del otro. Este fin de semana se ha estrenado en algunas ciudades españolas y en los próximos meses llegará a otras comunidades, como Andalucía. Con actores convincentes, muchos de ellos no profesionales o poco conocidos por el gran público y una realización poderosa, 'Naufragio' es una de esas películas que se salen de los caminos más tradicionales y que debería encontrar 'clientes' con o sin experiencia.
Si Pedro Aguilera con su segunda película, antes dirigió 'La influencia', es un director a tener en cuenta, hace ya varios años que el nombre de Ricardo Darín es una llamada a los 'clientes'. 'El secreto de sus ojos' fue el último éxito en España de este actor cuya sola presencia es un gancho para que las salas suban la media de espectadores. 'Un cuento chino', que se estrena ahora en España, ha tenido su mejor campaña publicitaria en el rostro de este actor argentino al que Hollywood nunca ha llamado a su puerta.
Darín es convincente en todos sus papeles. 'Un cuento chino' es una comedia agridulce en la que interpreta a un ferretero solitario cuya vida comienza a cambiar con la llegada de un inmigrante chino que ha viajado a Buenos Aires, tratando de olvidar un accidente que ha transformado cualquiera de sus planes de futuro. El Darín de esta película ,que dirige Sebastián Borensztein, es taciturno pero también solidario y compasivo. No siente miedo a la diferencia y cuán quijote planta cara a cualquier molino de viento cuando se produce una injusticia.
'Un cuento chino' no es Torrente; ni pirata; ni siquiera Shrek. Es Ricardo Darín. Ya saben 'se buscan clientes. También aquellos que no tengan experiencia'.

EL AMBIGÚ. LA VOZ DE CADIZ 19-06-2011

CINE Y GUERRA CIVIL


Fácilmente podemos encontrar más de dos centenares de películas relacionadas con la Guerra Civil Española. Ya durante el conflicto la  industria de Hollywood  rodó varios filmes sobre la guerra y algunos cineastas europeos también quisieron narrar el horror que se vivió en las tierras de España. Títulos como “Bloqueo”, con Henry Fonda y Madelaine Caroll; “The Last train for Madrid”,con Dorothy Lamour o “Love Under Fire”, con Loretta Young y Don Ameche.

Primeras figuras del Hollywood de los treinta que después, en 1943, produciría “¿Por quién doblan las campanas?” con dos de las estrellas rutilantes de aquellos años: Gary Cooper e Ingrid Bergman. Basada en una novela de Ernest Hemingway la película muy poco tuvo que ver con la realidad que dividió y enfrentó a los españoles durante los años treinta. Ni que decir tiene que no se pudo ver en España hasta el final del franquismo.

También hay títulos mucho más cercanos a la realidad que se vivió durante aquellos tres interminables años como “Sierra de Teruel”, del escritor, político y cineasta francés André Malraux o la excelente “Tierra de España”, de Joris Ivens con guión entre otros de John Dos Passos y  Ernest Hemingway, y narración de éste último y de Orson Welles. La versión francesa tuvo otro narrador de excepción: Jean Renoir.
No hay que olvidar tampoco la producción anarquista que produjo varios títulos de interés. A finales de 1936 el sindicado anarquista CNT era mayoritario en el sector del espectáculo  y unificó todos los salarios de los trabajadores  de la industria del cine. Durante poco menos de un año trabajaron en aquella industria, en plena guerra civil, en torno a 6.000 personas ,y se produjeron  unos cien títulos entre cortos, documentales o largometrajes como “Castilla se liberta”, “Aurora de Esperanza” y “Barrios Bajos”.  Todo aquel proyecto anarquista  está recogido en un documental reciente y recomendable, “Celuloide colectivo”, de Oscar Martín
El franquismo sustentó lo que después se convertiría en una filmografía absolutamente propagandística en las películas que rodó durante la guerra como “Sin novedad en El Alcázar” y alguna en los estudios de CINECITTA en Roma. Uno de aquellos títulos fue “Frente de Madrid”(1939) dirigida por Edgar Neville, uno de los grandes realizadores del cine español, que buscó un final de corte pacifista, lo que no gustó nada al naciente régimen. Se dice que en Roma  comenzó a gestarse el  llamado “cine de cruzada” que durante la década de los cuarenta y parte de los cincuenta produciría un sinfín de títulos abiertamente propagandísticos en que se ensalzaban  las virtudes de la raza, el patriotismo, la lealtad,la familia  o el espíritu religioso de los españoles. Títulos como “Raza”, “Balarrasa”, “”Escuadrilla”, “El santuario no se rinde” o “la fiel infantería” son ejemplos significativos hecho única y exclusivamente a mayor gloria del régimen
Antes de la desaparición del franquismo algunos cineastas, durante los sesenta, abogaron por la reconciliación entre las dos Españas. Títulos como “Tierra de todos”, de Antonio Isasi-Isasmendi  o “La orilla”, de Luis Lucia son dos de los más destacados.
De aquellos años son también algunas películas sobre los exiliados como “La guerre est finie”, de Alain Resnais o “España otra vez “,de Jaime Camino, con guión de Camino, Alvah Bassie  y  Román Gubern.
Gubern, catedrático, crítico e historiador cinematográfico en su libro “Cine español en el exílio” recuerda que más de un centenar de profesionales se marcharon de España durante la guerra  para establecerse y trabajar en otros países. Ésta hemorragia migratoria iba a convertirse en un factor decisivo para explicar la degradación del cine español ,especialmente, durante los años cuarenta.
La muerte del general Franco abrió las puertas a los cineastas que no habían podido expresar libremente sus ideas durante más de treinta y cinco años. Desde “Las largas vacaciones del 36” hasta  “Los días del pasado”, pasando por títulos como “La vaquilla”, “Madrid” “Tierra  y Libertad”, ”La lengua de las mariposas” , “Libertarias”  o “La niña de tus ojos”, hemos visto, desde todos los ángulos, un cine que nos ha acercado a nuestra historia reciente y ha reflejado los horrores de la guerra. Y ahora setenta y cinco años después el cine sigue llevando a la pantalla nuevas historias como las recientes “Las trece rosas”, “El laberinto del fauno”, ”Los girasoles ciegos”, ”la buena nueva” , “El perro negro” o ”Pan negro”  y además crecen los documentales que ahondan en aquella terrible contienda como los recientes “Las cajas españolas” o “Por los caminos de la memoria” sin olvidar títulos como “Caudillo”, “Exilio” ,”Los niños de Rusia” o “Extranjeros de sí mismos” ,que se han  convertido en un elemento esencial para explicar la Guerra Civil.
Aquella fue una guerra en la que todos perdieron, pero dónde existió un bando que se empeñó en que sólo había habido unos derrotados.
Durante cerca de cuatro décadas  buscó borrar del mapa a todo aquel que no comulgase con la ideología del régimen nacionalsindicalista .Nunca buscó la reconciliación y se empeñó en fomentar las dos Españas. La cárcel o el silencio. Muchos vivieran el exilio interior y  otros tuvieran que vivir y morir muy lejos de su tierra.  El cine es y ha sido la voz de la memoria. Nuestra memoria está llena de fotogramas, de imágenes imborrables que permanecen con nosotros hasta el final de nuestros días. Ese cine deja las páginas abiertas de nuestra historia, las heridas que aún permanecen hasta que algún día ayude a cerrarlas