12/07/2021

MADRES DE CINE

 

La madre en el cine de Pedro Almodóvar juega un papel esencial en buena parte de su filmografía. ”Todo sobre mi madre”, “Volver”, “Julieta” o la más reciente “Madres paralelas”, tienen a la figura materna como columna vertebral del relato. Madres coraje, madres modelo e incluso madres castradoras como la Lola Gaos de “Furtivos”.

Pero mucho antes que Almodóvar, John Ford hizo de la figura de la madre el personaje central sobre el que giraba toda la familia como vimos, por ejemplo, en una de sus obras cumbres “Las uvas de la ira” en que Jane Darwell concentraba todas las miradas y todas las acciones de su familia, sin apenas inmutarse y mostrando una infinita ternura y generosidad en años en que la miseria y el hambre se había adueñado de muchos norteamericanos.

Recuerdo a la Sofía Loren de “Dos mujeres”; a la madre coraje de “Rocco y sus hermanos”, a la luchadora Julia Roberts de “Erin Brockovich”; a la Kristin Stewart de “La habitación del pánico” o a Mary March en las distintas versiones de “Mujercitas”. Las madres de esta semana son muy diferentes, muy distintas, aunque tienen muchos puntos en común. Se trata de “La hija” la última propuesta de Luis Martín Cuenca y “Lamb”,  del islandés Valdimar Johannsson .Las dos tienen en común la maternidad de cualquier forma o a cualquier precio.

Martín Cuenca no es un director complaciente. Sus personajes son seres solitarios que buscan cumplir sus objetivos por encima de todo. Pueden ser las personas más amables, pero por detrás esconden comportamientos muy dispares a lo que aparentan. Lo vimos en “Caníbal”, incluso en “Autor” y lo refrenda en “La hija en que la pareja que forman Javier Gutiérrez y Patricia López Arnaiz acoge en su casa,  en mitad del monte, a una quinceañera embarazada (Irene Virguez) porque han acordado quedarse con la niña cuando ésta dé a luz. Para ellos no hay vuelta atrás la niña tiene que ser suya por encima de todo.

“Lamb” tiene en común que la pareja protagonista, es una pareja de mediana edad, sin hijos y que vive como los protagonistas de “La hija” en una granja solitaria, lejos de una población, en la estepa islandesa. Una vida monótona en la granja en la que se ocupan del rebaño y donde cada día es igual al anterior.

Premiada en el festival de Sitges como mejor película , “Lamb” es un drama, con gran dosis de cine fantástico ,cuando una de las ovejas pare una extraña criatura- El matrimonio la adopta como si fuese la hija que siempre esperaron. Como en la película de Martín Cuenca los protagonistas no atienden a razones ni siquiera cuando sus auténticos padres quieren recuperarla.

 Ambas mujeres, ambas madres impostadas ,con la complicidad de sus parejas, se afanan en formar una familia sin contar con los sentimientos de terceros, en este caso, los auténticos padres .

“La hija” y “Lamb” son dos películas inquietantes que plantean hasta donde somos capaces de llegar , con tal de conseguir nuestros propósitos y en este caso la categoría de madres, cuando  la maternidad es ya una obsesión.

(ARTICULO PUBLICADO EN LA VOZ.29-11-21)

12/03/2021

PÁGINAS SUELTAS (3) AMORES INFANTILES





MARI TERE.

Mari Tere tenía más de quince años , yo cuatro o cinco, pero la convertí en mi primera novia. Mari Tere se cruzaba en el portal o en la escalera o se asomaba a la ventana que daba al cuarto de estar de los abuelos. Era rubia, de ojos castaños y la mirada triste de los niños que vivieron el hambre. No tenía más hermanos, ni padre, murió en la guerra, en un bombardeo de la aviación franquista. Su madre había cosido sin pausa, de casa en casa, para mantener a su hija. Ella acababa de entrar en Galerías Preciados y la situación de madre e hija había mejorado considerablemente. Siempre iban juntas, como protegiéndose, como si el miedo se hubiese adueñado de sus cuerpos.
El Galerías Preciados de Callao

Cuando nos cruzábamos me sonreía, incluso me dejaba hacer alguna que otra carantoña. En una ocasión un incendio en el tercer piso hizo que nos refugiáramos en el bajo donde vivía una hermana de mi abuela, Lola ,viuda y su hijo José Manuel que con los años se convertiría en un alto directivo del mundo editorial. Mari Tere me daba la mano, mientras esperábamos que los bomberos terminasen con su trabajo, pero vi compungido, que la otra se apoyaba en la de Luis, un estudiante de derecho del segundo piso.
Bomberos en la colección ALAMY



Esa noche sentí los primeros celos y decidí, que ella ya no sería mi novia. Al poco Mari Tere y Luis se casaron y empezaron a fabricar hijo tras hijo. Me quedé en el quinto . Ella, tan delgada, engordó, y él se hizo poseedor de una enorme calva. Seguía cruzándome en la escalera y el rellano con aquel primer amor, pero ya no sentía el deseo infantil de que me acariciara.

A Mari Tere siguieron otras novias . En Pozuelo de Alarcón, durante el verano, donde mis padres alquilaban casa año tras año, coincidió que en el chalet de al lado había, como nosotros, una familia numerosa, pero a diferencia de la nuestra el mayor número de miembros eran del género femenino. Los mayores, tres chicos frente a tres chicas por lo que decidimos entablar relaciones en función de la edad. Es decir, yo con nueve años tenía como pareja a Mary Lo que tenía mí misma edad , y mis hermanos estaban en una situación similar con sus chicas.




Fotos de Todo Colección



Éramos pareja durante los tres meses de verano, es decir, compañeros de aventuras por los terrenos todavía no urbanizados, compañeros de bicicleta; de escondite, de merienda o incluso de castos besos cuando llegaban los momentos de los reencuentros o las despedidas.

Cuando la pubertad llamó a la puerta aquella complicidad que manteníamos se rompió para siempre. Hubo un día, no recuerdo cuál, que nuestras familias tomaron caminos diferentes, y nuestras vidas se separaron sin que nunca más volvieran a confluir. Muchos años después a raíz de un libro que publiqué, recibí una carta de Mary Lo recordando aquellos años en que no fuimos conscientes de que iban a terminar para siempre. No llegamos a vernos. Seguramente, ya nunca más podremos recordar y reírnos con aquella historia de amor que construimos en nuestra infancia.


EL CEBO. de Ladislao Vadja


Hubo otras mujeres como María-la apodaban Antoñita la Fantástica-,y tenía tres años menos que yo. Íbamos al mismo colegio y nuestras madres, los días de sol, nos llevaban con el resto de hermanos, a los altos del hipódromo donde está el Museo de Ciencias Naturales. Nuestros padres, por aquel entonces, trabajaban en la misma empresa y había una cierta amistad entre los dos matrimonios. No recuerdo bien a aquella novia, aunque el paso de los años me ha hecho verla con asiduidad en televisión y en revistas de cotilleo, sin embargo, si guardo en la memoria que una vez intentaron secuestrarnos. Estábamos algo apartados del grupo y fuera de sus miradas cuando un hombrecillo, enjuto, con los dientes rotos, se acercó a nosotros ofreciéndonos todo aquello que nos recomendaban no aceptáramos de nadie. Es decir, caramelos, regalices u otras golosinas que, generalmente, entraban con cuentagotas en nuestros paladares. Llevaba unas bolsitas de colores y nos aseguraba que en el coche que tenía al bajar la cuesta, había muchas más por lo que podríamos llevárselas a nuestros hermanos.

María dudó, era más pequeña, pero yo desde el principio le dije que no y llamé a mi madre. En un instante teníamos a las dos, la suya y la mía, a nuestro lado, preocupadas como estaban porque hacía unos minutos que nos habían perdido de vista . El hombrecillo hizo ademán de decir algo, pero se dio la vuelta y bajó a paso apresurado hacia la acera donde supuestamente tenía aparcado su coche. No se detuvo y cruzó, ya corriendo, toda la Castellana. Mientras mi madre, muy nerviosa, hablaba con un guardia del parque que le recomendaba que lo denunciase en comisaria ya que hacía unos meses habían desaparecido dos niñas en el mismo lugar, sin que nadie hubiera sabido más de ellas.Me queda la duda de que hubiese pasado con nosotros. Si hubiese desaparecido me ahorraría estas líneas y vosotros lectores no habríais conocido a María ,una showgirl , enormemente popular, durante una veintena de años. Aunque quizá, algunos, lo hubiesen agradecido.

A mí, en momentos puntuales también me llamaron Antoñita la fantástica. Me gustaba fabular historias, leía y veía mucho cine. Había tardes de jueves o de domingo, los sábados teníamos colegio, que nos metíamos en el cine de sesión continua a las cuatro y salíamos a las diez. El Chueca, el Colón, el Quevedo o el Príncipe Alfonso, fueron algunas de aquellas salas, hoy desaparecidas, que daban cobijo a niños de familias numerosas que permitían así, un descanso a los padres agotados por el trabajo tanto fuera como dentro de casa. Los cines acogían también a parejas de novios que buscaban en la oscuridad besos, abrazos y caricias que de no ser por el séptimo arte no hubiesen existido.

Aunque soldados y chicas de servicio, empleados de banca o administrativas, floristas o trabajadores de ultramarinos, estudiantes y personal sanitario no hayan visto muchas películas completas , seguro que mantienen cierta deuda con el cine. Gracias a la sala oscura pudieron magrearse, aunque siempre con el temor a que el acomodador, dueño del uniforme, no apuntase con su linterna a quienes parecían más entusiasmados, buscando avergonzarles y que toda la sala supiese que algunos se estaban metiendo mano en vez de compartir los castos y censurados besos de Carole Lombard y Clark Gable ; de Spencer Tracy y Katherine Hepburn , de Humprey Bogart y Lauren Bacall o de William Holden y Audrey Hepburn


SABRINA

Y es que quienes, como ya he dicho, portaban uniforme en aquella España del Partido Único eran herederos de las carabinas de principios de siglo XX o de épocas decimonónicas que seguían perdurando en aquel casto y católico país. Se sentían guardianes de la moral y en particular del sexto mandamiento que es el que tradicionalmente más ha preocupado a los jerarcas de la Iglesia Católica porque seguramente, el sexo nos hace libres y eso es peligroso.

CONTINUARÁ ...


12/02/2021

SEIS DIAS CORRIENTES.AVENTURAS Y DESVENTURAS DE TRES FONTANEROS

 

 

SEIS DÍAS CORRIENTES ( 85’). Es otra de las películas que se ha quedado fuera de los Goya y que tiene frescura y verdad .Es el tercer filme de la catalana Neus Ballús(“La plaga”)  quién construye un falso documental con las experiencias de tres fontaneros en los alrededores de Barcelona y su trabajo cotidiano durante seis días.

La película cuenta las peripecias de tres fontaneros reales, no son actores profesionales, que se interpretan a sí mismos. El excesivo y agobiante Valero; el callado y exigido Mohamed y el sabio Pep, quién prepara su jubilación cuentan con total naturalidad su día a día y sus relaciones con los vecinos que piden sus servicios.  

Es una película que tiene a la clase trabajadora como protagonista, pero muy lejos del cine de Ken Loach y al mismo tiempo pone el acento en ese racismo callado y solapado que existe en la sociedad española. Al final, el resultado es una comedia de corte costumbrista que permite conocer las situaciones que viven los fontaneros en las casas a las que acuden y los variopintos personajes que se encuentran en muchos lugares.  Seis días corrientes” ganó la espiga de plata en la Seminci y Valero y Mohamed fueron premiados como mejores actores en el festival de Locarno.

BLACK BOX, QUE SE OCULTA DETRÁS DE UN ACCIDENTE AÉREO

 

BLACK BOX (129’) no es una película habitual en el cine francés sino más bien un filme que sigue la línea de las grandes producciones con sello de Hollywood. Yann Gozlan (“El hombre perfecto”), su director, nos propone sin embargo una película sobre una catástrofe aérea, pero relatando la investigación posterior al accidente, con esa caja negra, que debe contener todos los secretos de por qué el avión se estrelló contra los Alpes. Un apasionante thriller de dos horas de duración que relata minuciosamente la investigación del protagonista(Pierre Niney),un frustrado piloto que cuenta, sin embargo, con un oído privilegiado que le permite encontrar los más recónditos sonidos. Aquí interpreta a un ingeniero de la BEA, organismo que investiga en Francia los accidentes aéreos.

Todas las sospechas apuntan a que la caída del avión en pleno vuelo se debió a un atentado terrorista, pero hay algún indicio que hace que el protagonista se obsesione en encontrar lo que realmente sucedió para que el aparato se estrellase. Lo consigue implicando a los espectadores que vivimos la misma tensión e incertidumbre que él investigador. Brian de Parma, Alan Pakula o incluso, Sidney Pollack parecen ejercer su influencia en este filme más que entretenido, si obviamos algunas conversaciones demasiado técnicas y lejos de oídos profanos . Eso sí, nos sumergiremos de lleno en el mundo de la aviación comercial , la seguridad y los interese ocultos de algunas compañías.

Junto a Pierre NIney , Lou de Laâge, Sebastien Pouderoux o el veterano André Dussollier conforman un solvente y acertado reparto.

EL AMOR EN SU LUGAR: ARTE FRENTE A BARBARIE

 

 

No es la primera película sobre el genocidio nazi contra los judíos ni será la última, si bien es cierto que la nueva propuesta de Rodrigo Cortés (“Buried”, “Luces rojas”), se desliza por caminos diferente a los habituales, para describir el empeño de un grupo de actores para mantener las representaciones en el gueto de Varsovia, durante el estado de terror que habían establecido los alemanes., el 16 de noviembre de 1940 cuando fueron encerrado en el centro de la capital polaca y separados del resto de la ciudad por un muro.

El amor en su lugar”(103’)  nos lleva inevitablemente a Ernst Lubisch y su “Ser y no ser”, aunque algo alejado del tono humorístico que le imprimió el genio norteamericano de origen alemán. La película de Rodrigo Cortés muestra una tragedia real , utilizando el teatro y el arte para mitigar el miedo, para llevar a los espectadores a otro mundo en que soportar el frío, la miseria o el hambre. Los cómicos tienen su propio drama, pero son capaces de esconderlo para entretener a los espectadores en un teatro oscuro y destartalado.

El amor en su lugar”, basada en hecho reales cuenta como esa compañía representó la obra mientras los dejaron las autoridades alemanas , buscando el aplauso de los espectadores, que era una forma de que todo pudiesen sentirse vivos.

En el interior de la compañía tenemos un triángulo amoroso protagonizado por la pareja protagonista y un tercero que fue novio de la actriz. Éste que sigue enamorado, le propone que huyan juntos y que se olvide de su pareja actual y de su hermana pequeña a la que cuidan. Es difícil elegir entre la vida y el amor .

“El amor en su lugar” tiene un plano secuencia inicial absolutamente magistral que nos describe como era el güero y quienes sobrevivían bajo unas condiciones lamentables, a merced del soldado alemán que decidiese apretar el gatillo.

Cuenta con un reparto internacional que encabezan Ferdia Walsch-Peelo, Clara Rugaar, Magnus Kreeper, Greya Parks, Valentina Bellé y Mark Ryder. Insisto una de las mejores películas españolas de este año e incomprensiblemente con tan solo dos candidaturas a los Goya,  mejor diseño de producción y mejor vestuario. Los académicos sabrán.

11/29/2021

PÁGINAS SUELTAS. 2 RECUERDOS DE UNA BUHARDILLA

 DE LA MILAGROSA a JORGE JUAN

Sanatorio La Milagrosa en los años cincuenta

Volvamos atrás, porque estábamos en un día señalado. El día en que nací. Debió ser especial. Era el primer hijo, el primer nieto, e incluso el primer sobrino. Muchos títulos que después,  con el paso de los años aprecias cada vez menos. Todos, incluida la treintena  de primos que hay entre las dos familias, recuerdan que soy el mayor.

Pero en aquel momento no era el mayor, era el único, y unos y otros entraban y salían  de la Clínica La Milagrosa para ver al niño.

Creo, me dijeron, que me taparon la cabeza porque la tenía un tanto abombada. “No se preocupe señora que esto es cosa de unos días”. Eso había dicho el médico pero, por si acaso, supongo que con una sábana, no sería con una toquilla de lana el mes de agosto, allí estaba yo, con toca, siendo objeto de miradas múltiples, y algún qué rico, qué ojos, se parece…

 De la Milagrosa, no sé cuantos días después, fui a parar a la calle Jorge Juan donde vivían los abuelos maternos. Era un cuarto piso, sin calefacción y sin un baño en condiciones. Vivían alquilados en una casa en que los pisos inferiores estaban ocupados, en su mayoría, por los dueños del edificio . El hijo de uno de los propietarios  es  poeta y durante el gobierno de José María Aznar ocupó un cargo relevante en el ministerio de Cultura.

Los abuelos eran serios, más él que ella, y muy religiosos. A él no le recuerdo nunca riendo y si escuchando el parte en la radio o tocando un viejo violín, dejando que la melancolía y seguramente la tristeza se adueñase de toda la casa. Iba siempre trajeado y trasmitía un aspecto grave y de cierta distancia. Todos le consideraban una buena persona que había quedado marcado por la guerra y por el hambre que padecieron él, su mujer y sus tres hijos. Abuela decía que si no llega a terminar la guerra hubiese muerto de avitaminosis, porque llevaba meses sin comer prácticamente nada. Vivió hasta el año setenta y fue la primera vez que sentí la muerte de cerca. Supe que había un final y que habría lágrimas y vestidos y trajes negros. Se guardaba silencio por el muerto, y gente a la que no conocías te abrazaba y besaba con un “te acompaño en el sentimiento”. Yo en los duelos doy la mano o un  golpecito en la espalda y no digo nada, si acaso un “lo siento”, siempre por el vivo porque el otro ya ni sufre ni padece. Siempre se recuerda a los muertos como buenas y grandes personas, a nadie se le ocurre, por ejemplo, decir, en pleno velatorio, que el finado era un sinvergüenza, o que había hecho fortuna con el estraperlo  o que tenía hijos repartidos por medio Madrid.

No era el caso de abuelo, ni mucho menos, el era un hombre culto y triste, que venía de la Andalucía profunda, de la Sierra de Segura a dónde no llegaban las guitarras, y si acompañaban no lo hacían por alegrías. 

De niño recuerdo que íbamos a buscarle a la salida de la oficina, en la calle Alcalá. Se alegraba de vernos pero no nos hacía muchas carantoñas. Tampoco solía hacernos ningún regalo, siempre era abuela, quién guardaba en su bolso algunas monedas para que comprásemos sacis, chicles de bola o regalices. También nos ayudaba en nuestras primeras salidas de juventud, y tenía una dulce sonrisa.   

De niño me hacía el dormido para quedarme con ella. Mis padres, que ya habían alquilado una casa en la prolongación de Príncipe de Vergara, entonces, General Mola, insistían en que me fuera con ellos, pero me hacía el remolón para quedarme con  mi abuela y de paso mi tía, que por aquel entonces aún no se había casado. Ya he dicho, que entre otros muchos títulos tenía el de primer sobrino, por lo que solía tener  algún aliado que apoyase mis intenciones.

Ejército de barrenderos datado en los cincuenta, aunque tengo mis  dudas por los uniformes de los guardias

En la casa de Jorge Juan, no había ascensor, y  chirriaba la madera de la escalera cuando comenzabas a subir hasta el último piso. Bueno no era el último, había una buhardilla muy fría y tenue ,dónde sus inquilinos, un matrimonio que yo veía muy mayor, andaban siempre agachados porque sus cabezas rozaban con el techo. En la misma habitación estaban la cama y la cocina y, una puerta que daba a un pequeño retrete. Olía a guisos y flores, porque Reme se sentaba en una silla los domingos, en la esquina con Velázquez y vendía en su cesto ramilletes de violetas y claveles. Facundo, su marido, trabajaba muchos domingos. Era barrendero y me gustaba tocarle los botones del uniforme que cada vez brillaban menos. Dos de sus hijos habían muerto en la defensa de Madrid. Uno en el Puente de los Franceses y el otro, a las tres semanas, en Brunete, al año de comenzar la Guerra. Sólo les quedaba el pequeño que vivía en Valdepeñas y trabajaba en una bodega. Creo que nunca llegué a conocerle. Ellos hablaban de él y evitaban recordar a  los hijos muertos. Juan estaba casado y les había dado ya tres nietos, pero nunca los vi. Los doscientos kilómetros que separaban la capital del pueblo, eran casi un  imposible. Los desplazamientos por tren o carretera no acababan nunca. Y encima el dinero apenas les alcanzaba para vivir.    

Postal años 50

Vivían en soledad, callados y sin poder cerrar sus heridas. Sólo alguna sonrisa  cuando mis hermanos y yo  subíamos a hacerles compañía y revolvíamos sus escasas pertenencias. Facundo nos enseñaba a barrer y  nos aleccionaba  a que no tirásemos nada  a la calle, ni un papel, a Reme, en cambio, siempre la recuerdo de pie ,removiendo la cazuela donde entraban legumbres, y algún día ,más bien escaso, dejaba caer en su interior pedazos de carne de vaca o conejo.

Subíamos con frecuencia pero no pasábamos mucho rato en la buhardilla. El frío entraba por todos los rincones, y en verano sudábamos nada más poner un pie en la entrada.

Ellos dos allí, solos. No tenían radio y sólo Facundo leía, aunque con dificultad. Abuelo nos daba el periódico del día anterior para que se lo subiésemos. En aquel tiempo había poca diferencia entre lo que dijesen las noticias de un día  para otro. Todos los días eran iguales, salvo que hubiese alguna desgracia, que también las había.  

En  poco más de 25 metros, un hombre y una mujer, ya mayores, casi ancianos, sin mirar para adelante, y carcomidos  por los recuerdos.

Un día no volví a verles más. Se desvanecieron como si nunca hubiesen existido. La buhardilla ya siempre estuvo cerrada. Nadie, volvió a subir. A lo mejor Reme y Facundo fueron fantasmas  que vendían flores y barrían las calles.

Homenaje a los barrenderos en el centro de Madrid

Aquellos fantasmas, que no existieron, hicieron que nunca tirase papeles  en las aceras, ni siquiera en los huecos de los árboles. Siempre, recuerdo a Facundo en la buhardilla, con la escoba y  a veces, apretándola tanto, que parecía que iba a romperla.

Monumento al buen cine

Ah, se me olvidaba. Por si tuviese que elegir una película de aquel año (1952).

CONTINUARÁ

11/28/2021

PÁGINAS SUELTAS. Buenas, pasaba por aquí



HOY EMPIEZA TODO





Gran Vía, en aquellos años José Antonio. Foto del Archivo Municipal


El día en que nací baden baden sobrevolaba Madrid. Las calles solitarias, macilentas, perezosas, escupían fuego evitando los pasos que hicieran crujir sus adoquines. Algún vehículo, ajeno a aquellas intenciones, atravesaba a poca velocidad una calle Velázquez de árboles y bulevares. Eran las cuatro de la tarde y los ciudadanos de los años cincuenta del pasado siglo, se refugiaban en sus casas buscando corrientes imposibles, maltratando el abanico, escuchando la radionovela o dejándose llevar por un profundo sopor, mientras esperaban la redentora caída del sol.


Uno de los carteles de la película de Berlanga

Aquel año (1952), Mr. Marshall había pasado de largo y las esperanzas para salir del hambre y la miseria de la posguerra parecían desvanecerse. Madrid era una ciudad hambrienta. Acababan de suprimirse las cartillas de racionamiento pero había necesidad en cada rincón, en cada rendija...La noche aceleraba la penuria y se hacía interminable para quiénes sumaban el recuerdo de los bombardeos que sembraban de estruendo, horror y muerte la ciudad. Madrid era la ciudad mártir de Rafael Alberti y la ciudad en la que uno podía perderse y buscar esperanzas, aunque no las hubiera.

Era 21 agosto y era tiempo de silencio. Silencio en las calles y en quienes caminaban, sin pasear y sin mirarse a la cara. El miedo seguía ahí y aun habrían de pasar más de dos décadas para que se desvaneciese. Los vencedores se habían ensañado durante la década anterior y las cárceles continuaban abarrotadas. La vida y la muerte, la muerte y la vida solo separadas por una fina línea, casi imperceptible, pero que estaba ahí, amenazando desde el poder de las armas, del hambre y sobre todo del odio.

Ese odio hizo que otros muchos dejaran atrás sus casas y sus gentes para evitar la cárcel o la muerte. Fueron aquellos de la España Peregrina que cantó León Felipe, y de los que no se hablaba, no se escribía, no se reconocía su existencia. Estaban desaparecidos, como fantasmas de un tiempo que se quiso borrar.

Se vivía un orden nuevo, o un orden viejo. El de la espada y la cruz, el de la cruz y la espada. Iglesia y Estado de la mano para imponer una España oscura, sórdida y sin palabras. Y el pueblo, como siempre en nuestra historia, a callar, amordazado ,durante casi cuarenta años.
Calle Velázquez. Archivo Municipal

Son las siete menos cuarto de la tarde. Hay una brisa casi imperceptible. La calle, lentamente, se va poblando de viandantes. Algunos ya han ocupado los bancos de los bulevares en la calle Velázquez. Otros se detienen en los quioscos y piden limonada, horchata o cerveza. El sol sigue apretando.


Cartel de la película de Stanley Donen


En el cine Goya se va formando cola para ver “Cantando bajo la lluvia” y una pareja abrazada espera su turno para sacar las entradas. Se besan. Pronto reciben la recriminación de un policía armada. Cualquier uniforme era válido para avergonzar a todo aquel que se mostrase efusivo en la vía pública. Un guardia del Retiro, un cura o un sereno. Un silbato , un grito o un chuzo. Y a los señalados sólo les quedaba el silencio.

Existía la leyenda de que casi todos los serenos eran asturianos. Eran de todos lados, de cualquier parte, con su chuzo y su manojo de llaves. “Voy”. Más palmas para confirmar que nos había oído. Paso rápido para abrir los chirriosas cerraduras de los portales y esperar la propina. Eran testigos activos para controlar a qué hora llegabas, con quien ibas o con quién venías. Muchos eran confidentes de la policía. Ayudaban a guardar la moral y las buenas costumbres, pero yo, todavía, no lo sabía.

Cuando se nace no se sabe a dónde llegas, ni quién te espera, ni menos aún, quién te va a acoger y hacerte miembro de su familia. Cuando se nace sales un tanto desorientado. Lloras porque abandonas la cueva acogedora y cálida en la que has estado bien alimentado durante nueve meses, sin preocupaciones de ningún tipo. Ya habrá tiempo.

Primero los arrumacos, a quién se parece, el pecho, los gases, dormir, el chupete, el hay que quitarle el chupete; después anda si ya gatea, mira ha dicho mamá, no, ha dicho papá, los primeros pasos, si ya anda, trastazo, lloros, y enseguida el hermano.

En aquellos años, casi todos, éramos príncipes destronados. Apenas empezabas a tomar posesión de tu status como ser vivo y andante cuando llegaba otro que te sucedería sin miramiento pero que en seguida viviría tu misma experiencia.

Tú, ya desde la barrera, y el siguiente, uniéndose a tus miradas nada compasivas, cuando el tercero iniciaba su brusca caída a las frías y duras baldosas. Lloraba y te quitabas del medio por si a alguien se le ocurría que podías haber sido el culpable de aquellas lágrimas y la inevitable hinchazón en la frente. El remedio era una moneda de cinco duros que se aplicaba sobre el naciente y morado chichón.

Los mayores luchaban denodadamente por alcanzar el cuarto de los padres para buscar una moneda que, con suerte, podía doblar la cantidad anterior. Las de cincuenta pesetas eran más grandes, más eficaces contra los chichones y de paso , si eran capaces de pasar desapercibidas, una vez cumpliesen su labor en la frente del lesionado, podían mejorar nuestros maltrechos bolsillos.

Había también ocasiones, en aquellas familias numerosas de hijo nuevo, año sí o año también, bendecidas por el franquismo y los puntos, en que el chichón pasaba a mayores y la sangre fluía con cierta intensidad. Las casas de socorro eran el remedio

Quienes comenzaban a andar a edad temprana, pongamos diez meses, se rompían el labio con pasmosa facilidad. Las baldosas fueron sus testigos.
Era el color del primer coche de mi padre; Con baca incluida

En la mía que sería una gran familia, aunque no lo supiera cuando nací, hubo múltiples y variadas roturas de huesos, innumerables brechas en la cabeza, dardos que se clavaron en la nuca de un despistado que no sabía que el tirador era incapaz de acertar en la diana;, venas abiertas en la rotura de cristales y pañuelos, muchos pañuelos blancos en los SEAT del padre que acompañaba aquellos viajes a la Casa de Socorro, con un timbrado y potente claxon.

Sobrevivimos.


CONTINUARÉ ( MIS PÁGINAS SUELTAS)

11/26/2021

ESPITIRU SAGRADO : Una película inclasificable.

 


 

No se muy bien donde podríamos encuadrar “Espíritu sagrado”(97'), el primer largo de Chema García Navarro, un director curtido en el cortometraje/(”El ataque de los robots de Nebulosa 5) que ya avanzaban el espíritu independiente e inclasificable de este alicantino, de Elche concretamente, que construye una historia delirante y surrealista sobre la ciencia ficción y la ufología ,en particular.

La película tiene como protagonista a José Manuel y el resto de miembros de la asociación ufológica Ovni-Levante que se reúnen una vez a la semana para intercambiar información sobre mensajes de otros mundos y abducciones.

Julio, el líder de la asociación muere inesperadamente , dejando a José Manuel como el único conocedor del secreto de las estrellas, que puede alterar el futuro humano . Mientras esto ocurre toda España busca a la hermana gemela de la sobrina de José Manuel, desaparecida hace semanas.

Hay un tono cómico que vira hacia situaciones más dramáticas . Los últimos diez minutos cambian completamente el relato…El espectador se encuentra de repente con un relato diametralmente opuesto, en un giro narrativo que le asombrará.



 Chema García Navarro, con más de una década dirigiendo cortometrajes siempre ha sentido pasión por la ciencia ficción y eso ha sabido trasladarlo a la pantalla. “Espíritu sagrado” entremezcla pasión por los ovnis, niñas desaparecidas, música new age, objetos y decoración kirsch. Es un estilo que se sustenta en el humor negro, en la incorrección política y en un profundo amor por su ciudad , Elche, donde ha rodado en su barrio, con sus amigos y conocidos y en uno de los bares a los que acuden regularmente.

Según ha contado Chema García Navarro la Idea de la película surgió de un programa de televisión local, con una asociación destinada a estudiar lo parapsicológico. Entre las actividades que citaban estaba alejarse de la ciudad y pasar la noche al raso, observando las estrellas. Lo llamaban Alerta ovni y los cinco integrantes d ela asociación ,diametralmente distintas, había formado, sin embargo, una familia esotérica en la que confiaban plenamente.

Esa familia “real”” es la que inspira a Chema García Navarro para crear sus personajes de “Espíritu sagrado·” una película inclasificable, mención especial en Locarno, candidata a los Feroz y seguramente friki, muy friki, pero, por esta vez, me siento un miembro más de “Ovni-Levante”.

 

 

 

 

11/25/2021

HUELE A NAVIDAD: ENCANTO Y EL REFUGIO


 

Encanto (103’)  no podía faltar a la cita de Disney con la Navidad. La poderosa empresa sabe lo que ocurre en estas fechas y que los niños van a empujar a sus padres a que l0s lleven a las salas animados por la publicidad y el marketing de los personajes de la película que inundan todos los rincones.

Lo latino parece estar de moda en la factoría después del enorme éxito de “Coco” hace unos años, los responsables de Disney se inclinan ahora por Colombia, por sus montañas, para introducirnos en un lugar mágico llamado Encanto. En ese lugar, en una casa muy particular vive la familia Madrigal donde todos tienen habilidades fantásticas y extraordinarias.   Una familia que me lleva a recordar a aquellos personajes enloquecidos y divertidos de Frank Capra en “Vive como quieras” . Muy enloquecido tendría que estar si no digo que el éxito está asegurado y Disney se engordará los bolsillos durante estas Navidades.

En España  “El Refugio”(83’)  tampoco renuncia a la Navidad y los productores saben que son los niños quienes llevan a los padres a las salas . Santiago Segura, siempre fuera de los Goya, rompe las taquillas con títulos como “A todo tren destino Asturias”  o “Padre no hay más que uno” y Macarena Astorga, quién este mismo año estrenó el thriller “La casa del caracol”, se adentra en el cine familiar para construir “El Refugio” una comedia de enredo, con personajes que abren y cierran puertas en un hotel rural en plena montaña. Viejo galán, galán emergente, representantes, novias, ex, directora de hotel, empleados y algún que otro niño se nos muestran en una instalación en que falta de todo debido a un fuerte temporal.  Una comedia coral con personajes y situaciones que hemos visto ya otra muchas veces y con un reparto en el que figuran Loles León, María Barranco, Antonio Dechent, Leo Harlem, David Guapo, Sara Sálamo o el peruano Carlos Alcántara.

Los mayores se aburrirán, pero los niños se divertirán que, de eso se trata.

MATERNIDADES: LA HIJA Y LAMB

 

 

Son dos películas muy distintas, “La hija”(122’) la última propuesta de Luis Martín Cuenca y “Lamb”(106’)  , propuesta del islandés Valdimar Johannsson pero ambas tienen en común la maternidad de cualquier forma o a cualquier precio.

Martín Cuenca no es un director complaciente. Sus personajes son seres solitarios que buscan cumplir sus objetivos por encima de todo. Pueden ser las personas más amables, pero por detrás esconden comportamientos muy dispares a lo que aparentan. Lo vimos en “Caníbal”, incluso en “Autor” y lo refrenda en “La hija” en que la pareja que forman Javier Gutiérrez y Patricia López Arnáiz acogen en su casa, apartada y solitaria, en mitad del monte, a una quinceañera (Irene Virguez)que se ha quedado embarazada, porque el propósito es que ellos se ocupen de la niña cuando nazca.

Javier se aprovecha para sus fines gracias a su condición de educador social que se ocupa de los jóvenes acogidos en un centro para su rehabilitación. Intenta, en todo momento ayudar a la joven, pero en complicidad con su mujer que anhela ser madre y da por hecho que la niña a la que dará a luz será para ellos. Esa maternidad no suscita ninguna duda para la pareja que se afana en conseguir sus propósitos ocultando a la chica y actuando en absoluta clandestinidad. Pero sus planes comienzan a torcerse cuando el joven que ha dejado embarazada a la quinceañera está dispuesto a ocuparse de la niña. La situación cambiará de forma radical.


“Lamb”( 106’)tiene en común que la pareja protagonista, es una pareja de mediana edad, sin hijos y que vive como los protagonistas de “La hija” en una granja solitaria en la  estepa islandesa. Una vida monótona en la granja, en la que se ocupan de las ovejas y donde cada día es igual al anterior.

Premiada en Sitges como mejor película , “Lamb” es un drama, que gira hacia el cine fantástico ,cuando una de las ovejas pare una extraña criatura- El matrimonio la adopta como si fuese la hija que siempre esperaron. Como en la película de Martín Cuenca los protagonistas no atienden a razones, ni siquiera cuando sus auténticos padres quieren recuperar a su criatura.

Valdimar Johannsson  ganó el premio a la dirección mientras que Noomi Rapace consiguió en el mismo festival  de Sitges el galardón a la mejor actriz.



UN filme inquietante y por momentos agobiante que no nos deja indiferentes.

11/19/2021

OTROS ESTRENOS. El regreso de Jane Campion. 19-11-21

 

Han pasado doce años desde que Jane Campion estrenara su última película en salas, “Bright Star” y la directora neozelandesa lo hace ahora con ánimos renovados, con el western, “El poder del perro”(126’) ,basada en la novela del mismo título que, Thomas Savaje, escribió en 1976.

Estamos en Montana, a principios del siglo XX, donde los hermanos Phil y George Burbank, viven con relativa armonía en el rancho de su propiedad. La llegada de dos nuevos inquilinos va a modificar su tranquilidad y su modo de vida. Phil se encargará de hacerles la vida imposible a los dos personajes que llegan a su propiedad.

Benedict Cumberbatch, Jess Pierners y Kristin Dust encabezan el reparto de la película más ambiciosa de la carrera de Jane Campion, la primera mujer que ganó la palma de oro en el Festival de Cannes y que posteriormente consiguió el oscar. En “El poder del perro” habla de los hombres, pero, sobre todo, de una masculinidad tóxica y de un machismo que asfixia.

 

Otro título destacado esta semana es “Última noche en el Soho”(116’), filme de corte fantástico y especialmente de terror que dirige Edgar Wright (Baby Driver).

Cuenta como Eloise (Thomasin McKenzie) llega a Londres para convertirse en diseñadora de moda. Una vez en la capital inglesa, Eloise, descubre que es capaz de trasladarse al pasado, concretamente a los años sesenta del siglo XX donde puede acercarse a su ídolo, Sandie (Anya Taylor Joy) que es una reconocida cantante. Pero en el Soho hay un lado oscuro y terrorífico.

Última noche en el Soho” es una película con multitud de guiños y homenajes al cine de terror en un Londres oculto y oscuro.

 

Y quiero para finalizar hacer referencia a una película española que es también un homenaje al cine de terror italiano, el denominado giallo que tuvo en Dario Argento a su máximo representante. Se trata de “Corten”, de Marc Ferrer, quien dirige una película inclasificable porque su principal propósito es que todo esté mal, empezando por las peores actuaciones que se recuerdan en nuestro cine, pero, como digo, se trata de eso.

Relata como un cineasta inmerso en su nuevo filme descubre que una serie de asesinatos parecen estar relacionados con él. Actuaciones en sórdidos cabarets, travestismo, parejas gays, ausencia de heteros, policías de una torpeza infinita ,prensa sensacionalista y sobre todo, un asesino, al que no conoceremos hasta el final, como mandan los cánones del cine giallio

Al público le ha gustado como lo refrenda el premio que ha obtenido en el Festival de Toulouse.

 

11/18/2021

PLANTADOS: QUIENES DIJERON NO A FIDEL CASTRO

 

En la semana en que el líder opositor cubano, Yúnior García ha salido de su país para refugiarse temporalmente en España, llega a las salas comerciales la película de Lilo Vilaplana, ·”Plantados” que narra los torturas las que fueron sometidos un grupo de cubanos que se opusieron al régimen castrista y como la sociedad internacional estuvo de espaldas, sin manifestarse en contra, a  las violaciones de los derechos humanos que de forma sistemática se han producido en Cuba.

 Generaciones pasadas tenían una idea romántica de la Revolución Cubana, pero la Revolución como otras muchas, ha acabado convirtiéndose en presidio para todos cuantos no estuvieron de acuerdo con las actuaciones de los nuevos gobernantes. Los protagonistas lucharon con Fidel contra la dictadura de Batista y acabaron presos . Los “Plantados” se negaron a negociar ningún tipo de acuerdo con el gobierno cuando les conminaron a que se plegasen a las condiciones del régimen que, pretendía aceptasen un plan de reeducación a cambio de reducir sus condenas. Desde el régimen se quería demostrar al mundo que en Cuba no se perseguía a nadie por sus ideas.  

 La película de Lito Vilaplana cuenta como un antiguo preso político que reside en Miami, después de pasar 25 años en prisión,  reconoce a uno de sus torturadores que vive desde hace tiempo en esta ciudad norteamericana. Mientras se plantea qué medidas tomar junto a otros exiliados, recuerda la brutal represión que sufrieron en las cárceles, con imágenes de las torturas a las que fueron sometidos.

 

El reencuentro entre víctima y verdugo no ha sido inusual en el cine con títulos que seguro recordaréis como ”Portero de noche”, de Liliana Cavani; “La muerte y la doncella”, de Roman Polanski o incluso “La vieja música”, de Costa Gavras , pero si es la primera vez que asistimos a esta propuesta desde el exilio cubano que pretende abrir los ojos a la comunidad internacional sobre la realidad de Cuba.

Plantados está protagonizada por Gilberto Reyes, Ricardo Becerra, Frank Egusquiza y Carlos Cruz, quienes interpretan a los personajes reales en los que está inspirada la historia. Está basada en hechos reales como testifican ,al término de la película, varios de los presos que describen los años que pasaron en las cárceles de Castro.

 

 

 

LIBERTAD. EL DESPERTAR DE UNA ADOLESCENTE.


 

Me ha parecido una de las propuestas españolas más interesantes de este año. ”Libertad”(104’), debut en la dirección de Clara Roquet, describe el despertar adolescente de Nora (María Morera)  una niña como cualquier otra, de una familia burguesa, que pasa sus vacaciones de verano en el chalet familiar de la Costa Brava.

La rutina del verano cambia de la noche a la mañana con la llegada de Libertad (Nicolle García) la hija de Rosanna, una inmigrante latinoamericana que se encarga de la limpieza de la casa y de los cuidados a la matriarca, muy debilitada mentalmente( Vicky Peña). Libertad, algo mayor que Nora se convierte en su cicerone para salir de casa, bailar con chicos o alejarse de las faldas de la madre(Nora Navas).

La historia se desarrolla desde los ojos de Nora pero los personajes secundarios, todas mujeres, juegan un papel clave en el desarrollo de la narración, que construye una historia de amistad que va a estar marcada por las diferencias sociales.

Libertad”, el debut en la dirección de Clara Roquet , muestra el paso de la infancia a la adolescencia, pero, sobre todo, describe dos mundos paralelos que no se unen ,el de la burguesía y el de los inmigrantes, tratado con exquisita sensibilidad.

La Nora de Clara Roquet es la Teresa ,en versión adolescente,  de la narrativa de Juan Marsé , que describe mundos diferentes: La burguesía acomodada y la clase trabajadora. Pero Nora, a diferencia de sus mayores si tiene necesidad de empatizar con el otro, de romper esas barreras sociales , esos vínculos que nos unen con nuestro entorno y la herencia recibida.

“Libertad” ,en todo su concepto, es una reivindicación de las adolescentes que protagonizan, una historia compleja, pero, al mismo tiempo, transparente que nos permite vislumbrar una buena carrera para Clara Roquet como ya les ha sucedido a algunas de sus amigas cineastas, tal son los casos de Carla Simón o Belén Funes.

“LA PUERTA DE AL LADO” O EL VECINO INDISCRETO


 

Viendo el debut en la dirección del actor Daniel Brühl, uno recomendaría a los constructores los tabiques de sus viviendas fuesen más consistentes y sobre todo, incapaces de filtrar las conversaciones de nuestros vecinos.

Brühl (“Good Bye Lenin”) sitúa su primera película en un bar berlinés al que entra (también actúa) poco antes de coger un avión que le lleve a Londres para concretar su trabajo en la película de una multinacional porque es un papel importante y sobre todo muy bien remunerado. Mientras toma el café, uno de los dos clientes que hay en el bar (Peter Kurth) pone en duda sus cualidades interpretativas. La conversación va subiendo de tono hasta que se entra en cuestiones personales. El cliente resulta que es su vecino y conoce mucho del actor sin que éste se haya percatado de que vive en su propia casa.

Los dos actores son prácticamente los únicos protagonistas de ”La puerta de al lado”(92’) , una película que se sustenta en un sencillo pero eficaz guion de Daniel Kehlmann, responsable también de unos diálogos muy bien construidos que pasan del humor al drama o viceversa. “La puerta de al lado” es una comedia dramática que muestra el contraste de los barrios de Berlín este y oeste o la fragilidad de la vida de los actores, la esclavitud de la fama, pero también el ego, el sentirse por encima del bien y del mal.

SPENCER: La princesa más triste

 

Si lo que cuenta Pablo Larraín en ”Spencer”(111’) se acerca a la realidad es fácil de entender que Diana Spencer quisiera apartarse de la familia real británica.

La película del realizador chileno se centra en la figura de la desaparecida Princesa de Gales en unas fiestas navideñas a las que debe acudir para cumplir el protocolo que marca la tradición y a pesar de que ya conoce que su marido, el príncipe Carlos, le engaña con Camila , que posteriormente se convertiría en su actual mujer.

Larraín muestra a una Lady Di, al borde de un ataque de nervios, obligada a mantener la tradición que contiene costumbres tan absurdas como que los invitados se pesen al llegar ,en una balanza. porque deberán salir de la casa con un kilo y medio de más, muestra de que han disfrutado con las comidas navideñas

Diana, interpretada brillantemente por Kristen Stewart, se muestra reacia a participar en las frías y etiquetadas actividades que están previstas hasta en el más mínimo detalle. Debe vestirse con la ropa que le han `previsto para cada día y cada momento; debe cerrar las cortinas mientras se desviste; debe llegar a la mesa antes que la reina o mantener silencio mientras almuerzan o cenan.

Ansiaba libertad ,poder entrar o salir y tomarse unas hamburguesas con sus hijos que son la única razón de que esté en el palacio donde se celebra la fiesta navideña. No aguanta la rigidez y el protocolo de la familia real británica. Lo detesta y así se lo confiesa a su única confidente, su única amiga ,que es la asistente que le asignan hasta que deciden que ejerce una mala influencia sobre ella.

Spencer más que un biopic es un cuento de terror en el que Diana tiene muy presente a la ajusticiada Ana Bolena o el deseo de adentrarse en la casa donde trascurrió su infancia y que ahora está semidestruida a pocos metros del lugar donde está obligada a permanecer. Es un personaje en el que perviven los fantasmas del pasado, pero, sobre todo los que pueden depararle los miembros de la familia real.

Más que buscar la libertad, Diana quiere huir y divorciarse del Príncipe Carlos. Aquel fin de semana decidió dejar atrás todo el boato de la corte británica. Lo que no queda claro es si los servicios secretos británicos, representados por un agobiante Timothy Spall, quien la recuerda continuamente todas sus obligaciones, decidieron dejarla vivir en paz. Parece que no fue así.

Aunque la película tienen momentos en que se hace un tanto reiterativa y lenta Kristen Stewart trasmite esa sensación de soledad y enorme tristeza que ya nos mostró en filmes anteriores como “Jackie” con Natalie Portman interpretando a Jackie Kennedy o incluso Ema una mujer sola y devastada por su sentimiento de culpa, después de haber entregado en adopción al  hijo que había adoptado.