SIMONE, LA MUJER DEL SIGLO". SIMONE VEIL UNA LUCHADORA POR EL FEMINISMO Y LA EUROPA DE LA DIVERSIDAD

 

 

SIMONE, LA MUJER DEL SIGLO(140’)

DIR: Olivier Dahan

INTÉRPRETES:  Elsa Zylberstein, Rebecca Marder, Elodie Bouchez, Mathieu Spinosi, Judith Chemia

Veo la trayectoria vital de Simone Veil poco después de volver a ver el documental de Ennio Morricone , un homenaje a uno de los grandes maestros de la música del siglo XX y que he adquirido en Blue-ray en una buena edición pero en la que me gustaría que figurase en los extras la excelente banda sonora.  

Tienes la sensación de que tanto Morricone como Veil  son como de la familia porque han acompañado siempre a toda mi generación. Cuesta aceptar que ya no están.   De tanto escucharlos, de tanto verlos los conviertes en protagonistas de tu propia vida.

“Simone, la mujer del siglo” es un acercamiento a la figura de una mujer capital en la Europa del siglo XX. Muchos de los aspectos que abordó como el feminismo, el aborto, las guerras o en antisemitismo siguen siendo  cuestiones que todavía preocupan a nuestra sociedad.

Olivier Dahan, director con anterioridad de los biopic sobre Edith Piaf y Grace de Mónaco, ha manifestado que su película no es un biopic que, está muy documentada pero que ha escogido episodios que considera relevantes no solo por el personaje en sí sino por la universalidad de sus testimonios u opiniones.

La que fuera primera mujer presidenta del Parlamento Europeo en 1979 antes de ser elegida para el cargo ayudó a humanizar las cárceles en Francia y contribuyó a la mejora de las condiciones de los presos en Argelia durante la guerra de independencia . Dahan lo recuerda en su película que, no sigue una trayectoria lineal ,para narrar la vida como mujer, madre y política de Simone Veil. La vemos con sus padres y hermanos en sus vacaciones de verano, pero otras imágenes nos llevan a los campos de concentración de Auschwitz o Brobeck donde vivió el horror del genocidio nazi y donde murieron sus padres y su hermano. Vemos a Simone interpretada en su juventud por Rebecca Marder y en la madurez por Elsa Zylberstein, en su papel de madre, en la compenetración con  su marido pero también en las desavenencias, en su lucha por reivindicar el papel de la mujer en la sociedad , en su cargo, no solo al frente del Parlamento Europeo, sino como ministra de Sanidad y propulsora de la  Ley del Aborto en Francia en 1974 o combativa contra la actitud de la Europa en la que tanto confiaba cuando se produjo la guerra en la antigua Yugoslavia.

Olivier Dahan retrata sobre todo a una mujer luchadora que no se rindió ni cuando la muerte la acechaba en los campos de concentración y que dedicó su vida a la búsqueda de justicia, al convencimiento de que en la unidad europea se sustentaban los valores democráticos y a plantar cara a cualquier tipo de fanatismo y en particular a los movimientos de extrema derecha emergentes en Francia y que hemos visto crecer en otros países.

Este tipo de películas ayudan a mantener viva la memoria de personas que han sido importantes en el tiempo que nos ha tocado vivir al mismo tiempo que, ayuda a que las nuevas generaciones puedan conocer quienes lucharon por esta Europa en la que ahora vivimos.