Ha sido una buena mañana. Por lo menos hemos visto algo
diferente, si entendemos como diferente recuperar la época de Pulp Fiction (1994) . “Siete psicópatas”
es el nuevo título del realizador anglo-irlandés Martin McDonagh quién ya sorprendió
agradablemente con su anterior y hasta hora único largometraje ”Escondidos
en Brujas”.“Siete psicópatas”incide en el humor negro que caracterizó su anterior filme y en el uso
de la violencia, menos sangrienta, que nos lleva a su admirado Quentin
Tarantino. Su protagonista Colin Farrell, con el que ya contó en “Escondidos
en Brujas”, representa el estereotipo de guionista en busca de inspiración
que ya ha dado buenos resultados como el Nicolas Cage de “Leaving Las Vegas”,de
Mike Figgis o el John Turturro de “Barton fink”,de los Coen.
En esta ocasión el realizador cuenta la historia de un
guionista que es incapaz de encontrar la inspiración necesaria para su próxima
película.Marty, Colin Farrell, busca en el alcohol su fuente inspiración
y va a ser la realidad la que vaya
configurando su libreto. Su amigo Billy (Sam Rockwell), un actor
desempleado y secuestrador de perros para
conseguir unos dólares con las
recompensas que establecen sus dueños, está empeñado en que su amigo triunfe y
de alguna manera le va facilitando material para el guión. Billy tiene
como socio a Hans (Christopher Walken)un hombre religioso pero con un
pasado violento. Todo aparentemente se desarrolla dentro de los límites de la
normalidad hasta que Billy secuestra el perro de Charlie (Woodie Harrelson),
un gánster psicópata que es capaz de
cualquier cosa con tal de recuperarlo.
Ironía, humor negro, diálogos trepidantes, uso del lenguaje
popular, referencias cinematográficas y culturales convierten a “Siete
psicópatas” en una película más que entretenida y a la que se le puede
achacar que alarga innecesariamente su final.
McDonagh, a sus 42 años,
ha superado ya su etapa de niño terrible del teatro británico con su admiración
por Harold Pinter y la confirmación de
que sus obras se han representado en 39 países. Tiene fama de transgresor y su
cine si intenta tener un sello diferente. Lo hemos visto tan solo en dos
largometrajes y con anterioridad en el corto “Six Shotter”, que ganó el
óscar en 2006 y que relataba como un hombre, que acaba de perder a su mujer, viaja
en tren y en el compartimento va un
extraño joven que resulta ser un psicópata.
Ahora no es uno, sino siete. Con los años han aumentado sus
psicópatas y también la confirmación de
que pasaremos un buen rato.
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