EL CHICO,VUELVE A LOS CINES CON CIEN AÑOS A SUS ESPALDAS
Está tan joven y fresca como siempre
Seguimos con muy pocos estrenos .Las multinacionales tienen echado el cierre y solo las distribuidoras independientes se atreven a plantar cara al virus. De hecho, el 93 por ciento de las películas que llegan a las salas proceden de estas distribuidoras como A Contracorriente, Surtsey, Bteam, Caramel o Avalon
Es todo un reto que intentan sacar adelante porque son muy pocos los espectadores que van a las salas y la verdad, es una pena porque están llegando títulos muy interesantes que hemos venido comentado en este mismo blog como “El Padre”, Hope”, “El profesor de persa” , “Mi niña” o la reposición de “Crash”…Un reestreno llamativo porque permite ver esta polémica película de David Cronenberg , veinticinco años después, restaurada en 4K.
Es lo mismo que ocurre este primer viernes de febrero con “El niño”(50’) aunque su conmemoración es todavía mucho más longeva. Cien años desde que el genial cineasta inglés construyera aquella emotiva historia de un niño abandonado por su madre soltera, en el coche de una familia rica que acaba siendo robado , y fuera accidentalmente recogido por un vagabundo que sobrevivía con pequeños trapicheos. Su primer largometraje y una obra maestra en la que Chaplin, en cierto modo, rememora su paupérrima infancia en Inglaterra.
Yo creo que tiene momentos inolvidables que arrancan sonrisas e incluso lágrimas . Charlot es un superviviente, un hombre que vive de la picaresca en un mundo en el que es ignorado. Es ingenioso ,siempre con su bombín, su raída levita o el bastón que le dan una cierta distinción y le hace diferente al resto de vagabundos. Es el vagabundo elegante que abre con estilo la cajita donde guarda diversas colillas, eligiendo con deleite, la que le parece más apropiada. Es el vagabundo que seduce con su simpatía a la mujer del policía y es también el “socio” del chico (Jackie Coogan) al que protege y cuida y al mismo tiempo le convierte en su cómplice para conseguir algún dinero. Chaplin es el cristalero que arregla las ventanas después de que “el chico” estampe una buena pedrada.
Inolvidable el combate de boxeo del chico, de cinco años, con otro bastante mayor. Un combate pleno de ingenio como el que tiene posteriormente Chaplin con el hermano mayor del contrincante de su chico, dispuesto a dejarle K.O a la primera de cambio.
Maravillosa la persecución de Chaplin por los tejados para conseguir recuperar al chico al que se lo han llevado los servicios sociales a un orfanato o la licencia onírica que se permite con angelitos, demonios o perros voladores .
“El chico” es una de esas películas que es difícil olvidar, sustentándose en el talento de Chaplin pero también en Jackie Coogan, el primer niño prodigio de la historia del cine, un talento natural que llamó poderosamente la atención de Chaplin cuando lo vio actuar y bailar con sus padres, cuando apenas tenía cuatro años. Se convirtió en una celebridad y ganó millones de dólares durante su etapa infantil pero su madre le dejó sin un duro. Cuando a los veintiún años quiso su dinero no recibió nada. Tras aquella experiencia que, le llevó a demandar a su madre, promovió una ley para proteger a los pequeños actores.
Y finalmente, en la película, la madre del chico , como en más de treinta películas de Chaplin, fue Edna Purviance quién interpreta a una madre soltera que, intenta ayudar a los más humildes cuando pasados unos años se convierte en una estrella del espectáculo.
Cincuenta minutos de duración, menos de una hora, para una película que merece verse en pantalla grande.
Es todo un reto que intentan sacar adelante porque son muy pocos los espectadores que van a las salas y la verdad, es una pena porque están llegando títulos muy interesantes que hemos venido comentado en este mismo blog como “El Padre”, Hope”, “El profesor de persa” , “Mi niña” o la reposición de “Crash”…Un reestreno llamativo porque permite ver esta polémica película de David Cronenberg , veinticinco años después, restaurada en 4K.
Es lo mismo que ocurre este primer viernes de febrero con “El niño”(50’) aunque su conmemoración es todavía mucho más longeva. Cien años desde que el genial cineasta inglés construyera aquella emotiva historia de un niño abandonado por su madre soltera, en el coche de una familia rica que acaba siendo robado , y fuera accidentalmente recogido por un vagabundo que sobrevivía con pequeños trapicheos. Su primer largometraje y una obra maestra en la que Chaplin, en cierto modo, rememora su paupérrima infancia en Inglaterra.
Yo creo que tiene momentos inolvidables que arrancan sonrisas e incluso lágrimas . Charlot es un superviviente, un hombre que vive de la picaresca en un mundo en el que es ignorado. Es ingenioso ,siempre con su bombín, su raída levita o el bastón que le dan una cierta distinción y le hace diferente al resto de vagabundos. Es el vagabundo elegante que abre con estilo la cajita donde guarda diversas colillas, eligiendo con deleite, la que le parece más apropiada. Es el vagabundo que seduce con su simpatía a la mujer del policía y es también el “socio” del chico (Jackie Coogan) al que protege y cuida y al mismo tiempo le convierte en su cómplice para conseguir algún dinero. Chaplin es el cristalero que arregla las ventanas después de que “el chico” estampe una buena pedrada.
Inolvidable el combate de boxeo del chico, de cinco años, con otro bastante mayor. Un combate pleno de ingenio como el que tiene posteriormente Chaplin con el hermano mayor del contrincante de su chico, dispuesto a dejarle K.O a la primera de cambio.
Maravillosa la persecución de Chaplin por los tejados para conseguir recuperar al chico al que se lo han llevado los servicios sociales a un orfanato o la licencia onírica que se permite con angelitos, demonios o perros voladores .
“El chico” es una de esas películas que es difícil olvidar, sustentándose en el talento de Chaplin pero también en Jackie Coogan, el primer niño prodigio de la historia del cine, un talento natural que llamó poderosamente la atención de Chaplin cuando lo vio actuar y bailar con sus padres, cuando apenas tenía cuatro años. Se convirtió en una celebridad y ganó millones de dólares durante su etapa infantil pero su madre le dejó sin un duro. Cuando a los veintiún años quiso su dinero no recibió nada. Tras aquella experiencia que, le llevó a demandar a su madre, promovió una ley para proteger a los pequeños actores.
Y finalmente, en la película, la madre del chico , como en más de treinta películas de Chaplin, fue Edna Purviance quién interpreta a una madre soltera que, intenta ayudar a los más humildes cuando pasados unos años se convierte en una estrella del espectáculo.
Cincuenta minutos de duración, menos de una hora, para una película que merece verse en pantalla grande.
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