Es una cadena, pero son muchas las distribuidoras que han vuelto a posponer sus estrenos debido a los numerosos brotes de covid 19 que se están dando en nuestro país. Los pases de prensa escasean y los exhibidores se las ven y se las desean para conseguir que el público acuda a las salas. Tenía previsto referirme esta semana a “Papicha, sueño de libertad” pero su estreno ha quedado pospuesto hasta el siete de agosto. Una película realmente interesante que se retrotrae a la Argelia de los años noventa en que las mujeres querían labrarse su propio camino frente al creciente fundamentalismo. Espero poder contaros su historia y la impresión que me ha producido, pero mientras ,con la suspensión de estrenos previstos como “Una obra maestra” que finalmente no llegó a las pantallas la semana pasada o “Quisiera que alguien me esperara en algún lugar” basada en una novela de Anna Gavalda que, lamentablemente ha retrasado su estreno al menos, en dos ocasiones.
Viendo el panorama, espero que se estrene, “The Beast”(130’), de la que hice una referencia la semana pasada y que, finalmente retrasó su estreno hasta este viernes. He podido verla y os comento que es una película, muy entretenida, con toques de humor ácido, aunque el arranque nos muestra el macabro asesinato de una niña.
Entra en eso que se ha venido en llamar “Asian noir” ese cine asiático que se sustenta en el crimen y la investigación criminal como ocurre con otras filmografías, tradicionalmente la francesa y no digamos la norteamericana o posteriormente la nórdica. Y es que “The Beast” en muchos momentos me lleva a la literatura de Jö Nesbo. Es una película puramente de género de un director, Lee Jeong-ho con trayectoria en su país, pero con ninguna película exhibida en España. Cuenta como dos policías, con una pésima relación, deben hacerse cargo ,como ya os he dicho, del brutal asesinato de una niña.
La película se ambienta en un mundo donde prevalece la desolación y el pesimismo, algo habitual en el último cine coreano, pero que deja hueco para un cierto sarcasmo.
Tenéis asegurada algo más de dos horas de acción con mucha acción, buenas dosis de violencia y la constatación de que la corrupción no tiene limites ni fronteras.Por cierto, está basada en una historia real.
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