1/06/2014

2013: AÑO NEGRO PARA EL CINE Y LOS LIBROS



Nuevo año, esperanzas renovadas y a ver que nos depara. Si nos detenemos en el mundo de la cultura si tan solo fuese un poco mejor que el que nos acaba de dejar nos daríamos, como diría un castizo, con un canto en los dientes.
Y es que el mundo del cine y de los libros pasa por sus peores momentos. En 2013 la recaudación en taquilla en las salas cayó casi un 17 y medio por ciento lo que supuso un total de 507 millones de euros repartidos por toda la geografía española que, inexorablemente ve como todos los años desaparecen salas y más salas cinematográficas.
Total, las cifras dicen que en el año que ha terminado se recaudaron casi 120 millones de euros respecto al precedente. Mucho menos dinero y pocas perspectivas de que esto mejore. Y la culpa no ha sido solo del cine español porque las recaudaciones de las superproducciones de Hollywood  más rentables, apenas alcanzan los 14 millones de euros como ha sido el caso de la película de animación “Los Croods” o  la nueva entrega de “El hobbit” cuando, por ejemplo “Lo imposible” de Juan Antonio Bayona hizo una caja de 41 millones en 2012.
Este año la película española más taquillera ha sido “Mamá”, con algo más de 8 millones. Un filme de terror dirigido por el argentino afincado en Barcelona, Andrés Muschietti que casi ha doblado en taquilla a los filmes de dos directores consagrados: Pedro Almodóvar (“Los amantes pasajeros”) y Alex de la Iglesia (“Las brujas de Zugarramurdi”)
El IVA del 21% pero sobre todo la piratería que no cesa están acorralando al cine en España algo similar a lo que está ocurriendo en el mundo de los libros donde autores consagrados como Ken Follet , Dan Brown o Arturo Pérez Reverte han vendido en papel en tono a un 50 o 60 por ciento de sus obras anteriores.
Se están comprando cada vez más libros electrónicos pero la piratería también se ha asentado en este sector. Según diferentes estadísticas en Francia, por ejemplo, se compran 4’6 libros al año por cada aparato. Aquí en España estamos en el 0’6. 
El resto pues se descargan gratuitamente, así de sencillo y de preocupante porque nadie es capaz de parar esta sangría que afecta al mundo editorial pero sobre todo a los autores que van a terminar cobrando porcentajes ridículos por unas novelas o libros de investigación en los que se han enfrascado durante meses o años.
En este país el trabajo parece que no se valora y continúan las gracias y las bromas entre amigos que se ufanan de bajarse tal o cual película; música y menos, pero también, libros que se suman a esta lista de productos culturales en peligro de extinción.
Hay que tomárselo en serio y en 2014 buscar medidas que detenga esta vergonzante piratería que afecta a los  autores de este país que es como decir a la cultura y su legado para futuras generaciones.


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