No he sido
un gran aficionado a las motos pero Ángel Nieto forma parte de los personajes
que he admirado profundamente por su coraje y decisión. El pequeño piloto
zamorano, aunque criado en el madrileño barrio de Vallecas, fue de aquellos que
supieron superar todas las dificultades y convertir en realidad su pasión y sus
sueños.
Arriesgó
todo y ganó. No solo esos doce más uno títulos mundiales sino el respeto de todos sus rivales. Recuerdo que si veía
sus carreras y en especial las del circuito madrileño del Jarama que fue uno de
sus talismanes. El abrió el camino a las nuevas generaciones de motoristas y ha
sido el referente para la catarata de campeones mundiales que hemos tenido
desde principios de los años ochenta en que se retiró.
Dejó las
competiciones pero Ángel Nieto nunca de desvinculó del motor y se convirtió en un comentarista
de lujo de TVE en las carreras del Mundial. Con sus opiniones parecía empujar a
nuestros campeones hacia la meta. Les daba la fuerza que él tuvo en las
pequeñas cilindradas donde superaba a todos sus rivales.
Siempre tuve
la impresión de que Ángel Nieto era uno más de mi generación. Porque le tenía
como una persona cercana, al que poder saludar si te lo encontrabas por la
calle. Tenía una gran sonrisa y la seguridad que da haber sorteado a la muerte
en cientos de carreras a más de 200 Km por hora y sin las protecciones que
tienen los actuales pilotos.
El destino
ha sido cruel porque ha querido
que muriera en la carretera,
cuando conducía tranquilamente un quad camino de su casa en Ibiza. Es
como si se hubiera vengado de todos los años en que burló a la muerte en
circuitos de todo el mundo.
Su muerte me
ha traído a la memoria otro hecho acaecido en 1975. Sin haber pisado nunca una
gran plaza de toros si recuerdo algunos toreros de aquella época como Antonio
Bienvenida, quién después de cientos de corridas, ya retirado, encontró la muerte cuando toreaba unas
vaquillas en el Escorial.
Ángel Nieto
toreó las motos, los circuitos, la velocidad y su final le vino a lomos de una vaquilla. Hoy y siempre será leyenda. (PUBLICADO EN LA VOZ.7-8-17)
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