12/27/2014

ADIÓS,2014,ADIÓS

Nochevieja. En unas horas se cumplirá la semana número 52 del calendario. Tan sólo cincuenta y dos semanas para cerrar un año  y  enseguida volveremos a la misma rutina. Siempre buenos deseos y esperanza de que 2015 sea mejor que el año que dejamos atrás. Es momento para recordar, para guardar en el baúl de la memoria esos hechos que irán formando el puzzle de nuestra vida. Un nacimiento; una muerte; un viaje; una pareja; amores; desamores; éxitos profesionales; desempleos, primer trabajo; universidad… Los medios de comunicación ayudan a que recordemos. En estas fechas acompañamos nuestras vivencias personales con aquellas que conforman la historia. Hemos visto cómo ,acabando el año, cubanos y estadounidenses comienzan tímidamente a acercarse después de  más de medio siglo de desencuentros;  seguimos viendo cómo crece y crece el numero de inmigrantes que intentan alcanzar suelo europeo porque huyen del hambre o de la violencia de sus países; en 2014 siguen todavía conflictos como el de Siria o Ucrania y los radicales islámicos continúan matando y secuestrando indiscriminadamente a hombres mujeres y niños. Cada año las políticas domésticas se quedan pequeñas ante la magnitud de lo que acontece en este mundo global. Lo último, si no nos despertamos en unas horas  con algo nuevo que afecte a toda la comunidad internacional, ha sido ese ataque cibernético a la distribuidora norteamericana Sony. Primero por querer estrenar “La entrevista”, la película satírica sobre el dictador norcoreano Kim Jong-un y después por haberlo hecho en plataformas digitales y más de 200 salas independientes de Estados Unidos. Su exhibición se entiende como un triunfo de la libertad de expresión  y un desafío para todos aquellos que quieran coartarla. La intolerancia del régimen norcoreano ha promovido una campaña de promoción para la película, que va a hacer que se vea en todo el mundo sin que los espectadores se cuestionen su calidad .Siempre ha ocurrido lo mismo cuando desde sectores radicales políticos o religiosos se ha intentado boicotear una película, una exposición o un libro. Hay que dejar abiertas las puertas a la creación o la crítica y que sean los ciudadanos quiénes decidan. No se puede ceder ante el chantaje de los fanáticos. En Estados Unidos ha vencido esa opción y confío en que se extienda a todos los países.



Espero seguir contándoselo, cuando dentro de 52 semanas, tan sólo 52 semanas,volvamos a esperanzarnos con el  nuevo año. Feliz 2015


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